El Sistema de Administración y Enajenación de Bienes (SAE) logró la meta de recaudar poco más de 80 millones de pesos, pese al retiro de 10 lotes de joyas, relojes y otros artículos y el desinterés por temor, prudencia o insolvencia para pujar por un extravagante anillo de oro con diamantes, que otrora fuera propiedad de algún capo del narcotráfico no identificado y que generó gran expectativa entre el público inversionista por su alto valor de salida de un millón 400 mil pesos.

El director general del SAE, Sergio Hidalgo Monroy Portillo, calificó de exitosos los resultados de la subasta y destacó la transparencia del proceso para vender bienes que por distintas causas llegaron a formar parte de los activos del gobierno federal.

Durante la subasta presencial hubo 424 postores. Los mayores precios ofrecidos durante el segundo y último día en la competencia abierta de posturas correspondieron a los helicópteros ejecutivos Bell –procedentes del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi)–, el primero con precio de salida un millón 600 mil pesos y asignado en 3 millones 200 mil pesos, y el segundo con precio base de 1 millón 350 mil pesos, vendido en 2 millones 550 mil pesos.

La organización de esta subasta que por primera subastó bienes valiosos procedentes de causas penales tuvo un costo de aproximadamente 1 millón 500 mil pesos.