Guadalajara, Jal., 19 de noviembre. El amor libre, el divorcio, las políticas antinatales, el aborto, los pretendidos matrimonios entre personas del mismo sexo y el derecho de adopción para éstos, son ataques constantes a la familia, tendientes a deteriorarla, expresa el cardenal de Guadalajara, Juan Sandoval Íñiguez en una carta pastoral con motivo de la Revolución Mexicana.

Titulada Ante las amenazas a la familia, la Iglesia y el Estado, indica que tras la consumación de la Revolución de 1910, se evidencio que la unidad, el diálogo y la justicia son los caminos para la superación de conflictos y que su pérdida acarrea consecuencias devastadoras para la sociedad.

El religioso apunta que los pobres no representan ningún valor para el libre mercado, y hoy se destinan menos recursos a programas de vivienda, salud, nutrición y educación para los necesitados.

Hay lentitud en tomar acuerdos y resoluciones. Están pendientes varias reformas necesarias para el desarrollo del país: la política, la hacendaria, la energética. ¿Por qué no se han hecho? Porque se piensa más en el interés del partido o del grupo que en el bien del país, señala.