El ministro presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) encabezó ayer la ceremonia en la que fueron depositados objetos en la cápsula del tiempo del Poder Judicial de la Federación. Ministros, magistrados electorales, funcionarios federales y legisladores donaron objetos históricos que permanecerán 100 años guardados en espera de que las nuevas generaciones los conozcan cuando se cumpla el bicentenario de la Revolución Mexicana y los 300 años del inicio de la gesta de Independencia.

Los objetos son desde medallas conmemorativas, documentos, escritos, programas y documentos oficiales relacionados hasta objetos a los que los donantes atribuyeron un valor especial.

El ministro Salvador Aguirre Anguiano donó, entre otras cosas, unos anteojos; su compañero Fernando Franco no se quedó atrás y encapsuló una pluma fuente color vino y tarjeta escrita con lápiz, un puro personalizado y una pipa, un reloj de mano, un pañuelo con sus iniciales, una bolsa de plástico con lápices, plumas y marcadores, y una cartera usada con un billete de 100 pesos, cinco tarjetas de presentación, licencia de conducir y diversas tarjetas comerciales.

Desde mascadas hasta togas

La ministra Margarita Luna Ramos se desprendió de un equipo de telefonía celular, una nota periodística y una carpeta de piel negra con su nombre; Olga Sánchez Cordero donó una mascada de seda (usada).

El consejero de la Judicatura Federal entregó notas, dibujos y documentos, un reloj ornamental y un abrecartas.

El magistrado electoral Manuel Gómez Oropeza donó un pasaporte –no aclaró de quién–, credenciales diversas y una billetera con contenido; su compañero Alejandro Luna Ramos se desprendió de un par de mancuernillas; mientras Salvador Olimpo Nava Gomar también dejó una billetera con contenido (usada), un reloj, unos anteojos (usados) con estuche, tarjetas de presentación y de crédito.

A nombre del extinto ministro José de Jesús Gudiño Pelayo se depositaron, entre otros objetos, un encendedor, billetera con credenciales, credencial de la SCJN, reloj de mano, pluma fuente y pipa.

En cambio, el ministro presidente, Guillermo I. Ortiz Mayagoitia dejó corbatas y mascadas institucionales, togas con iniciales, mallete con su nombre y diversos documentos.

El presidente del Banco de México, Agustín Carstens, depositó una colección de monedas conmemorativas, y Melquiades Morales Flores entregó una medalla conmemorativa del Senado de la República.