En las décadas pasadas, uno de los grandes problemas padecidos por el país es que, de pronto, se vive la incapacidad de planear. Se pensó que los mercados podrían resolver todos los asuntos, incluida la planeación, estableció el rector de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), José Narro Robles.

Para qué invertir esfuerzos en planear si los mercados, esa entelequia poderosa, son los que dictarán lo que tiene que pasar. Pero lo que ha sucedido con eso es un desastre, subrayó al inaugurar las nuevas instalaciones de la Unidad Académica de Sistemas Arrecifales (UASA) del Instituto de Ciencias del Mar y Limnología (ICMyL) de la UNAM.

Dijo que desde la universidad se debe retar esa forma de ver la vida y el desarrollo de instituciones, y pensar qué se debe hacer.

La UNAM, por su biografía, tiene un rol particular y la sociedad espera que cumpla ese papel. Si no la cuidamos y no la consolidamos, le haremos un daño a México, sentenció.

En el encuentro, Leticia Rosales Hoz, directora del ICMyL, informó que el nuevo espacio académico cuenta con 12 investigadores, cuatro becarios posdoctorales, 25 administrativos y alrededor de 30 estudiantes que han logrado, con su esfuerzo y dedicación, que la UASA sea reconocida como un centro de excelencia por el Banco Mundial.

Situada en la barrera arrecifal mesoamericana en el Caribe mexicano, la UASA reúne a un grupo de especialistas que realizan estudios sobre la estructura y función del ecosistema coralino. En ese espacio se imparten cursos internacionales y la investigación que se realiza es de frontera, de primordial importancia ante los cambios climáticos.