La propuesta del Gobierno del Distrito Federal de incrementar las tarifas por el servicio de agua potable para 2011 dividió a la bancada del PRD en la Asamblea Legislativa del Distrito Federal. Diputados de Izquierda Democrática Nacional (IDN) y de Izquierda Social (IS) afirmaron que no avalarán ningún aumento que no sea el ajuste conforme a la tasa de la inflación.

En entrevistas por separado, los perredistas señalaron que tienen que ser solidarios con los habitantes de la ciudad, ante el panorama de crisis económica, por lo que resulta inconveniente desarrollar la infraestructura hidráulica a costa del bolsillo de los capitalinos.

Alejandro Sánchez Camacho, vocero del grupo parlamentario, aseguró que la decisión se tomó como grupo político y como tal explorarán otras salidas. Nuestro equipo técnico está revisando de dónde podemos obtener estos recursos, porque estamos hablando, según las cifras que nos han dado, de 140 millones de pesos, aproximadamente, que se pueden cubrir revisando otros rubros.

De Izquierda Social, la diputada Valentina Batres dijo que el agua como los medicamentos son insumos de sobrevivencia humanos, por lo que si estamos en contra del aumento en medicinas no podemos estar en favor de un incremento al agua. No queremos ir al escenario de ver el agua como mercancía, puntualizó.

El desarrollo de la infraestructura no justifica el alza, expresó. Adelantó que este miércoles el grupo parlamentario se reunirá para iniciar la discusión al respecto y tomar una postura definitiva.

Sobre el tema, la coordinadora de la bancada, Alejandra Barrales, dijo que se debe actuar de manera responsable. El primer objetivo es garantizar el abasto de agua; darle la vuelta no resuelve el problema, y el segundo, explorar alternativas que impacten menos a los ciudadanos.

Estoy convencida de que cualquier gobierno tiene la obligación de garantizar y hacer eficiente el servicio, pero eso también implica aplicar recursos al agua, apuntó.