En medio del desconocimiento sobre la venta de alimentos y bebidas en las escuelas de nivel básico, El Poder del Consumidor convocó a padres de familia y profesores a demandar a las empresas que expendan sus productos más de una vez a la semana.

Alejandro Calvillo, director de la organización, informó este lunes que los lineamientos estipulan la comercialización de la nueva comida chatarra sólo un día a la semana, por lo cual las compañías podrían ser denunciadas legalmente en caso de que no cumplan con esa regla.

Las empresas perderían las concesiones si decidieran violar los Lineamientos generales para el expendio y distribución de alimentos y bebidas en los planteles de enseñanza básica, cuyo objetivo es disminuir y prevenir la obesidad infantil, aseveró Calvillo en una conferencia de prensa.

El acuerdo con los lineamientos fue publicado en el Diario Oficial de la Federación en agosto pasado. Establecen que botanas, galletas, pastelitos, confites y postres, siempre y cuando cumplan con las características indicadas, podrán incluirse una vez a la semana, en sustitución de una preparación de alimentos, para así no rebasar el contenido energético diario del refrigerio.

Ello es importante, explicó Alejandro Calvillo, porque los proveedores de alimentos y bebidas tienen que suscribir un instrumento jurídico con las escuelas, en el cual se comprometen a cumplir dichos lineamientos.

Este lunes comenzaron a aplicar las disposiciones, aunque sin ninguna promoción o propaganda del gobierno federal para informar a profesores y padres de familia sobre los contenidos de los acuerdos.

Por el contrario, empresas como Jumex promueven sus productos en los medios de comunicación, en los cuales señalan que autoridades educativas y de salud recomiendan consumir jugos y néctares.

Es preocupante, porque las madres creen que los néctares son bebidas saludables y no es así, afirmó Xaviera Cabada, nutrióloga que colabora con El Poder del Consumidor.

Calvillo explicó que los mexicanos pensamos que los néctares son jugos concentrados, pero en realidad son jugos adulterados con azúcares, saborizantes y colorantes añadidos.

En México ni siquiera existe una norma oficial sobre néctares, por lo que Jumex debe ser sancionado por divulgar información que desorienta a los consumidores, expuso.

El vacío legal en este segmento de bebidas obedece a que Jumex y Del Valle se oponen al diseño de esa norma, agregó.

Es una práctica irresponsable y gravísima que Jumex o Bimbo, con la marca Barcel, se aprovechen de los lineamientos para comercializar sus productos como recomendaciones de las autoridades.