Bajó el número de migrantes y se elevó la cantidad de hogares encabezados por mujeres
Viernes 4 de marzo de 2011, p. 37
Con 112 millones 336 mil 538 habitantes, la mayor preocupación de la población en México es la falta de empleo, reveló el Censo de Población y Vivienda 2010.
Según los resultados definitivos presentados ayer por el presidente del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), Eduardo Sojo, poco más de una quinta parte de las respuestas captadas por los entrevistadores censales, 20.1 por ciento, identificó la desocupación como el principal problema de la población, distribuida en 192 mil 400 localidades del país.
Los resultados definitivos contienen cambios importantes en la dinámica demográfica del país en los últimos 10 años: una reducción de 31.9 por ciento en el número de migrantes al extranjero, respecto al censo de 2000; la religión católica, que en la década pasada representaba 88 por ciento, en 2010 bajó a 83.9 por ciento de la población de cinco años y más, mientras la evangélica elevó su presencia de 5.2 a 7.6 por ciento en el mismo periodo.
México es un país pluricultural en que se hablan 89 lenguas, es habitado por 6 millones 695 mil 228 personas de cinco años y más de lengua indígena, y hay 15.7 millones que se reconocen como indios por su cultura. Las principales lenguas habladas son: náhuatl, maya, mixteca, tzeltal, zapoteca, tzotzil, otomí, totonaca, mazateco y chol.
Otros cambios en la dinámica demográfica, identificados por el censo 2010 son: la proporción de hogares encabezados por mujeres aumentó de 20.6 a 24.6 por ciento entre 2000 y 2010; la población casada descendió de 45.8 a 40.5 por ciento entre 1990 y 2010, mientras las parejas en unión libre casi duplicaron su participación, al pasar de 7.4 a 14.4 por ciento.
Según los resultados definitivos, la población mexicana continúa siendo predominantemente joven. La mitad tiene 26 años de edad, pero se observa un envejecimiento paulatino al disminuir la proporción de niños y aumentar la de adultos. En 1990 la mitad de los habitantes era menor de 19 años, y en 2000 la mediana de la pirámide de población se situaba en 22 años.
En cuanto a las personas que emigraron del país, Eduardo Sojo apuntó: “la población que migró al extranjero en el quinquenio anterior al censo 2010 fue de 1.1 millones, de los cuales permanecieron en el extranjero 723 mil al momento de la entrevista, y 351 mil ya habían regresado.
Al comparar estas cifras con el Censo 2000 se observa que el número de migrantes internacionales se redujo 31.9 por ciento
. Esta reducción fue resultado, probablemente, dijo, de las dificultades de acceso a Estados Unidos y de la situación económica en ese país
, a la par de que registra una mayor tasa de retorno.
Los resultados definitivos del censo 2010 también hicieron evidentes situaciones sociales agravadas en los últimos años por las confrontaciones y refriegas armadas en territorio nacional. En dos de cada diez viviendas localizadas en la frontera con Estados Unidos no hubo quien abriera la puerta a los representantes del Inegi, porque estaban abandonadas.
Al publicar por primera vez información de todas las viviendas del país, se cuenta ahora con la certeza de que el parque habitacional está constituido por 35 millones 617 mil 724 viviendas, de las cuales 80.4 por ciento está habitada, 14 por ciento han sido abandonadas (casi 5 millones), y el 5.6 por ciento restante se utiliza de manera temporal.
Los visitadores censales encontraron que la proporción de viviendas abandonadas en las entidades de la frontera norte es 31 por ciento más elevada que la media nacional. Las cifras señalan que 18.5 por ciento de las viviendas de la franja fronteriza norte del país están abandonadas por causas, se infiere, dijo Sojo, relacionadas con el clima de violencia creado por el narcotráfico y otros ilícitos.
Los resultados definitivos del Censo 2010 revelaron que en Baja California 18.8 por ciento de las viviendas han sido abandonadas; en Chihuahua esa proporción es de 18.7; en Zacatecas es de 18.2, y en Tamaulipas, de 18.1.