El titular de Educación, Mario Delgado Carrillo, calificó a la Secretaría de Educación Pública (SEP) de intolerante, al negarle la entrada el lunes pasado a una escuela primaria por considerar que se trataba de un acto proselitista. Sin embargo, dijo que buscará ingresar a los planteles, porque padres y maestros lo están pidiendo.

Al término de la presentación del libro Orgullosas de leer y escribir, testimonios de mujeres alfabetizadas, afirmó que “en educación no podemos perder tiempo y creer que podemos tener visiones tan cortas ni ser tan intolerantes en el tema cuando existe una demanda creciente de llevar programas para mejorar la calidad.

La decisión es seguir trabajando aunque no guste a otras autoridades y lo consideren un acto político. Nuestra presencia en la primaria Carlos Bauer, ubicada en la delegación Gustavo A. Madero, era poner en marcha talleres para padres, pero un enviado del secretario de Educación Pública (Alonso Lujambio) lo impidió, pues la consigna específica era que mi presencia, en particular, molestaba al funcionario, destacó.

El incidente es grave

La postura de la dependencia federal, de no permitir actos políticos en los centros educativos, es correcta, consideró, pero el programa Educar es padre no tiene ese sentido.

El incidente es grave, porque muestra mucha intolerancia de la SEP, falta de información sobre lo que se está haciendo y una profunda ignorancia respecto de qué es lo que están solicitando los padres de familia.

Mencionó que acudieron a invitación de la escuela. No quiero entrar en más detalles de oficios y demás. La formalidad necesaria se realizó; quien está haciendo (de esto) un acto político es la autoridad federal, la SEP, al sacarme por razones políticas, insistió ante cuestionamientos de medios de comunicación de que la solicitud se dirigió al delegado Víctor Hugo Lobo, no a él, y que no hubo ninguna solicitud para ese evento ante la dependencia.

No podemos aceptar tener una educación mediocre, porque lo que todos queremos es lo mejor para nuestros hijos, comentó Delgado.

Llamó a su homólogo federal a tener mucha calma ante intereses políticos de otra naturaleza, pues quienes trabajamos en educación tenemos que tener la cabeza muy fría, ser muy tolerantes y no perder de vista que lo que más nos importa es la educación de los niños de la ciudad.