La resolución permite adoptar todas las medidas necesarias
para proteger a la población civil
Diez votos en favor y cinco abstenciones; un ataque puede ocurrir en cuestión de horas
Viernes 18 de marzo de 2011, p. 2
Nueva York, 17 de marzo. El Consejo de Seguridad de Naciones Unidas votó favorablemente este jueves que se permitan los ataques aéreos para detener la ofensiva de Muammar Kadafi contra las fuerzas rebeldes de Libia y los ataques se esperan a la brevedad. La resolución permite todas las medidas necesarias
para proteger a civiles e imponer militarmente un cese el fuego al dirigente.
La resolución sobre Libia presentada por Líbano, Francia, Estados Unidos y el Reino Unido, exige un cese el fuego inmediato en Libia y autoriza a los estados a adoptar las medidas necesarias para proteger a la población civil amenazada, en particular, en Bengasi. También defiende establecer una zona de exclusión aérea en el país árabe para defender a los civiles, decide inspeccionar el territorio, barcos y aviones libios para asegurar la aplicación del embargo de armas, y ordena el congelamiento de propiedades y recursos económicos de las autoridades libias.
El ministro francés de Relaciones Exteriores, Alain Juppé, advirtió que no había mucho tiempo para intervenir. Puede ser cuestión de horas.
La resolución fue adoptada en momentos en que Kadafi anunció un asalto sobre Bengasi, bastión de los rebeldes.
La votación entre los 15 miembros del consejo fue de 10 países a favor: Francia, Estados Unidos, Reino Unido, Líbano –en nombre de la Liga Árabe– Bosnia, Gabón, Nigeria, Colombia, Portugal y Sudáfrica; cero en contra, y cinco abstenciones: China, Rusia, Brasil, Alemania e India.
Para adoptar la medida era necesario el voto positivo de nueve de los 15 miembros del Consejo de Seguridad y que los cinco miembros permanentes China, Rusia, Estados Unidos, Francia y el Reino Unido, no la vetasen.
Los países que se abstuvieron criticaron que la resolución da pie a una operación militar internacional en territorio libio.
El apartado que provocó mayores discrepancias y las críticas de los países que se abstuvieron es el que autoriza a los estados miembros, tras notificarlo al secretario general de la ONU o al secretario general de la Liga Árabe, a adoptar todas las medidas necesarias
para proteger zonas pobladas por civiles, incluida Bengasi
, que estén bajo amenaza de ataque
.
Peter Wittig, embajador alemán ante la ONU, dijo que su país no apoya la opción militar y no contribuirá con fuerzas armadas
.
Li Baodong, embajador chino ante Naciones Unidas y presidente rotatorio del organismo, recordó que su país siempre ha estado en contra de intervenciones
extranjeras. Su par ruso, Vitaly Churkin, alertó que la resolución abre potencialmente las puertas a una intervención militar a gran escala
.
Maria Luiza Ribeiro, embajadora de Brasil ante el organismo mundial, dijo que la resolución contempla medidas que van más allá del pedido
de la Liga Árabe de establecer una zona de exclusión aérea y que pueden exarcerbar
las tensiones en Libia y causar “más daño que bien a los civiles que se quiere proteger.
El embajador libanés Nawaf Salam, dijo que la medida no implica la ocupación de un solo centímetro de territorio libio
.
Ante la resolución adoptada este jueves, Libia estimó que ésta amenaza la unidad
del país y constituye un llamado a los libios a matarse
entre ellos, según declaró a la agencia Afp Jaled Kaaim, viceministro de Relaciones Exteriores.
La Unión Europea se dijo dispuesta a colaborar para aplicar
la resolución.
Horas antes de la votación del Consejo de Seguridad, Susan Rice, embajadora de Estados Unidos ante Naciones Unidas, dijo que la zona de exclusión aérea tenía limitaciones inherentes
para proteger a civiles que estaban en riesgo inmediato
, y en ese sentido dijo que Estados Unidos creía que tendría que contemplar otras medidas que quizá vayan más allá de la zona de exclusión aérea
.
El Departamento de Estado de Estados Unidos expresó su preocupación de que Muammar Kadafi vuelva a vincularse con el terrorismo si triunfa en el enfrentamiento contra los rebeldes libios, según afirmó William Burns, director político del Departamento de Estado.