En la celebración del 58 aniversario del asalto al cuartel Moncada, cientos de mexicanos ratificaron su apoyo y solidaridad con la Revolución Cubana, cuna de lucha, resistencia y rebeldía en Latinoamérica.

Frente a la embajada estadunidense en México, demandaron la libertad de los cinco cubanos presos en el país del norte y se unieron a la propuesta de los familiares de las víctimas de Sucumbíos, Ecuador, para declarar persona “non grata” al presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, en su próxima visita a México.

La lluvia y la granizada que cayeron ayer en el centro de la ciudad de México no impidieron la movilización que ese grupo realizó desde el Hemiciclo a Juárez hasta la sede diplomática, donde los manifestantes quemaron y luego rompieron una bandera estadunidense en señal de repudio a las políticas emprendidas contra el pueblo cubano y naciones gobernadas por la izquierda en América Latina.

Vivian López, de la Asociación de Cubanos Radicados en México José Martí, afirmó durante el mitin que el propósito de Estados Unidos es continuar intentando apropiarse el territorio cubano.

Por eso, exigimos se reivin- dique al pueblo cubano, su heroico esfuerzo e historia, demandó, acompañada ésta exigencia por la consigna ¡Cuba sí, yanquis no!

En México el futuro es de muerte: América del Valle

A su vez, América del Valle, del Frente Popular en Defensa de la Tierra, de San Salvador Atenco, pidió tomar ejemplo de la lucha del pueblo cubano, sobre todo cuando para México el futuro es de muerte.

Aprovechó para enviar un saludo al presidente venezolano Hugo Chávez, y luego enalteció las revoluciones cubana, bolivariana y de Ecuador.

La Asociación de Padres y Familiares de las Víctimas de Sucumbíos, a su vez, destacó que el aniversario del asalto al cuartel Moncada constituye una enorme tradición para los pueblos de América Latina, es un “episodio en la historia moderna de Cuba que marcó el inicio de la gesta revolucionaria de su pueblo en busca de su independencia y libre determinación.

Una fecha y una lucha que han sido y siguen siendo un ejemplo digno para los pueblos del mundo. Es el día en que todos los oprimidos nos hermanamos con una de las más grandes batallas que se han dado por detener al imperialismo yanqui y sus voraces consecuencias.

En su pronunciamiento, convocaron a sumarse a un “gran acto de protesta contra la visita de Juan Manuel Santos a México, el lunes primero de agosto, a la una de la tarde, frente a la embajada de Colombia en el país. Repudiemos al responsable del asesinato de nuestros hijos y de miles de hermanos colombianos, declarémoslo persona non grata en México, a la par de exigir que sea detenido por los crímenes cometidos contra nuestros hijos Verónica, Juan, Soren, Fernando y Lucía”.

La gente congregada sobre Paseo de la Reforma demandó en múltiples ocasiones la libertad de los presos políticos cubanos Fernando González (alias Rubén Campa), Gerardo Hernández, Ramón Labañino (Luis Medina), Antonio Guerrero y René González, quienes purgan largas condenas en Estados Unidos, uno de ellos cadena perpetua, acusados de espionaje.

Portando mantas, los mexicanos expresaron su sentir: el futuro de Cuba es con la Revolución, no con el imperialismo. Mejor morir de pie que vivir arrodillado.

Jesús Escamilla, del Movimiento de Solidaridad con Cuba, llamó a destrozar la bandera estadunidense, al considerarla un símbolo oprobioso.