San Agustín Etla, Oax., 2 de septiembre. En un país tan desorientado moral y éticamente, si algo te puede dar un sentido es la filosofía, expresa Paulina Rivero Weber, catedrática de la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y coordinadora por parte de la máxima casa de estudios del simposio internacional Mundo, arte y muerte: sobre la determinación de Martin Heidegger del lugar del arte moderno en el pensamiento del Ereignis, que se desarrolla en el Centro de las Artes de San Agustín (CaSa), Etla, Oaxaca.

El encuentro, que concluye este sábado, ha contado con la asistencia de 11 estudiantes de la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM; alrededor de 40 del área de humanidades, de la Universidad Autónoma Benito Juárez de Oaxaca, que apenas el lunes pasado abrió la carrera de filosofía; cerca de 25 de la licenciatura en comunicaciones, de la Universidad Mesoamericana, así como estudiantes que cursan la licenciatura en educación primaria en la Escuela Normal para Docentes del Estado de Oaxaca.

Respecto de la eliminación de la enseñanza de la filosofía como materia básica en los planes de estudio en el país, Paulina Rivero Weber asevera: Parecía ser que el gobierno, o las personas encargadas de la educación en México cada vez tienden más a intentar privar a las personas de la reflexión humanística, lo cual es terrible porque si algo puede darte una orientación sobre el camino a seguir en un país tan desorientado moral y éticamente es la filosofía.

Entonces, más bien deberían de hacer lo inverso: tratar de meter un poco más de humanidades en los temarios en lugar de pretender sacarlos. Hay que seguir dando la lucha, no hay que permitir que se logre excluir las humanidades de los programas de educación media

También hay que insistir en que la filosofía corre el riesgo de encerrarse en la academia y no debe, debe de salir a la calle, hablar a las personas y ponerse en un vocabulario tal que ellas la comprendan sin creer que por esto baja del nivel. Puedes estar al nivel más alt, simplemente hablando de manera clara.

La investigadora Paulina Rivero Weber, en el CaSa de San Agustín Etla, Oaxaca, durante la entrevista con La JornadaFoto Ezequiel Leyva

Por cultivar más las humanidades

Para Paulina Rivero Weber esa situación resulta paradójica, porque algunas compañeras, como Rebeca Maldonado y yo, hemos tratado mucho de atender este tipo de actos en los que la filosofía se difunda.

Por ejemplo, los estudiantes de la Facultad de Filosofía y Letras organizaron un foro que se llamó La filosofía se va a la calle, asistimos y colaboramos.

También a instancias de la UNAM participan las filósofas Maldonado, María Antonia González y Rosaura Martínez. Rivero Weber aclara que cuando la institución le pidió coordinar a los académicos interesados en participar en el simposio, la invitación fue mucho más amplia. Avisé a todos los que habían publicado algún libro o artículo sobre Heidegger, pero muchos no pudieron venir porque ya tenían compromisos en otro lugar.

La entrevistada hace votos por que la presencia de la Facultad de Filosofía y Letras sea un primer paso para seguir haciendo actividades en torno a la filosofía, el arte, la estética y, en general, en las humanidades en el CaSa.

Reitera el compromiso de la UNAM de publicar una memoria en español con las ponencias dictadas en el simposio. También “proponemos a Lourdes Báez (directora del CaSa) la posibilidad de impartir algún curso o diplomado aquí sobre introducción a la filosofía o crítica de la cultura.

Rivero Weber califica de factible y deseable la difusión de la filosofía fuera del recinto académico, siempre y cuando no se caiga en una cosa populista. Es decir, congresos masivos en los que nadie entiende nada, no creo que sea bueno. Aquí ha habido gran asistencia, pero no es masiva. Hay oportunidad de dialogar, de que los asistentes se acerquen a los ponentes y les planteen cuestiones.