Autoridades no reforman el obsoleto régimen legal por temor a represalias, alerta Amedi
Lunes 19 de septiembre de 2011, p. 35
La Asociación Mexicana de Derecho a la Información (Amedi) advirtió que el apagón analógico y la transición a la televisión digital terrestre (TDT) provocará que haya mayor concentración en la televisión abierta debido a la multiprogramación o multiplexeo que permite esta tecnología, y que podría convertirse en una barrera de entrada a otros competidores, si no existe una legislación adecuada.
El multiplexeo o multiprogramación consiste en que los concesionarios puedan incorporar otras señales a la explotación de los seis megahercios (Mhz) que les corresponden, y tener hasta seis canales donde antes había uno.
La Amedi dijo que con estas nuevas condiciones tecnológicas Televisa tendría no cuatro canales –dos nacionales y dos regionales–, sino 16 o más; mientras Televisión Azteca pasaría de dos a por lo menos a ocho señales, sin que el asunto esté debidamente abordado por la Comisión Federal de Telecomunicaciones (Cofetel), a lo que se suma que ni este órgano regulador ni otra instancia de gobierno previeron el pago de contraprestaciones por la multiprogramación.
Detalló que en 2010 el gobierno federal otorgó a Televisa 60 canales digitales y a TV Azteca 31, cuyas concesiones vencen en 2021. Grupo Multimedios (Milenio Televisión) ha recibido ocho canales; el Organismo Promotor de Medios Audiovisuales de la Secretaría de Gobernación tiene 13, y el Gobierno del Distrito Federal uno, al igual que otras cuatro empresas, por lo que Televisa y TV Azteca concentran 77.7 por ciento de los canales digitales autorizados por esta administración.
La Amedi criticó que los retos que implica la digitalización de la televisión no están siendo resueltos por la autoridad ni por el Congreso, renuentes a reformar el actual régimen legal obsoleto que legitima la concentración, por temor a represalias mediáticas. Por su parte, la Comisión Federal de Competencia (CFC), órgano antimonopolios, sólo se ha limitado a emitir opiniones y no ha dejado en claro el régimen de derechos adquiridos y las prácticas anticompetitivas que implicaría explotar varios canales digitales
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El grupo de especialistas encabezado por Aleida Calleja puntualizó que entre las muchas inconsistencias que la Cofetel ha generado con miras al apagón analógico figuran que los concesionarios podrán arrendar capacidad espectral, lo cual convierte a la radiodifusión en un servicio de telecomunicación y pone en duda la función social del medio, la vigilancia de las transmisiones, la naturaleza y propósito de las estaciones e incluso la nacionalidad de los operadores de señales
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El apagón analógico se ha convertido en una complicación para el gobierno federal debido a que mientras el decreto presidencial con el que se adelantaba a 2015 está detenido en la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), la Cofetel acaba de anunciar que va a avanzar en los trabajos al retomar el acuerdo de 2004, con miras a culminar la migración en 2016, pero con modificaciones indispensables que apenas se van a definir a través de una consulta pública.