Para retomar el diálogo debe reconocer fronteras previas al 67 y frenar asentamientos
Desde la tumba de Arafat habla de una primavera palestina
rumbo a un Estado independiente
Netanyahu advierte que si la ANP no deja de lado sus peticiones no podrá haber negociación
Lunes 26 de septiembre de 2011, p. 22
Ramalá, 25 de septiembre. Al ser recibido como héroe en Ramalá por miles de sus compatriotas, el presidente palestino, Mahmoud Abbas reiteró hoy su exigencia de que Israel paralice totalmente
la construcción de asentamientos para retomar las conversaciones de paz. Abbas, quien visitó la tumba de su antecesor Yasser Arafat, exigió de nuevo el reconocimiento de las fronteras previas a 1967 como base de un futuro Estado palestino.
El premier israelí, Benjamin Netanyahu, en declaraciones a la televisora estadunidense NBC, se pronunció por nuevas negociaciones y advirtió a Abbas: si ustedes quieren la paz, dejen todas sus condiciones previas de lado
.
Ante decenas de miles de simpatizantes concentrados en la plaza Yasser Arafat con banderas y grandes fotos de Abbas, el líder de la ANP dijo que no habrá negociaciones sin legitimidad internacional ni cese completo de la colonización
israelí.
El líder, de 76 años, llegó de Jordania tras una escala de 24 horas en Ammán y recorrió los 20 kilómetros que separan la capital jordana de Ramalá, en Cisjordania, vitoreado por un pueblo eufórico.
El editorialista del diario palestino Al Quds calificó el regreso del presidente Abbas a su patria como el de un héroe
, debido a la determinación de Abbas ante la Organización de Naciones Unidas (ONU), a pesar de haber sido presionado hasta el último momento por Estados Unidos y por Tony Blair, enviado del Cuarteto para Medio Oriente, para evitar que presentara la histórica petición de afiliación ante la Asamblea General del organismo mundial.
Al llegar a la Muqata, sede de la presidencia de la ANP en Ramalá, Abbas caminó por una alfombra roja hasta la tumba de su antecesor, Yaser Arafat, y dirigió un discurso breve y emotivo.
Se dice que hay una primavera árabe, pero también hay una primavera palestina
, y añadió que ésta camina hacia la creación de un Estado independiente con capital en Jerusalén.
Nuestra campaña internacional ha comenzado. El viaje será largo y lleno de obstáculos, pero con la determinación de nuestro pueblo lo superaremos
, añadió entre aplausos y gritos de la multitud, que enarbolaba pancartas exigiendo al Consejo de Seguridad de Naciones Unidas que acepte el pedido hecho el viernes para que Palestina se convierta en el Estado 194 del organismo.
El mundo entero ha escuchado su historia, sus deseos y sus expectativas
, y reiteró: queremos nuestros derechos por la vía pacífica, por la vía de la negociación
, pero transmitió que no será cualquier negociación
.
Abbas exigió de nuevo el reconocimiento de las fronteras anteriores a la ocupación israelí en 1967, que incluyen Cisjordania, la franja de Gaza y Jerusalén este como capital del Estado palestino.
Interrogado el domingo en Estados Unidos por la cadena NBC, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, instó a los palestinos a retomar las conversaciones de paz sin condiciones previas
con el fin de alcanzar la paz en Medio Oriente.
Los palestinos quieren un Estado, pero a cambio deben aportar la paz. Lo que intentan hacer en la ONU es obtener un Estado sin aportar la paz a Israel o aportar a Israel la paz y la seguridad. Eso es erróneo. Eso no debe llevar al éxito, sino al fracaso
, sostuvo.
Hanan Ashrawi, negociadora palestina, replicó en la cadena estadunidense ABC que son los israelíes quienes ponen condiciones previas
para reiniciar la negociaciones, como la anexión de Jerusalén y retirar el tema de los refugiados de la agenda
. Quieren todo, quieren anexionar todas las colonias, y después decir negociemos
, criticó.
Por su parte, el canciller de Israel, el ultraderechista Avigdor Lieberman, principal socio de coalición de Netanyahu, apoyó la oferta del Cuarteto para Medio Oriente, pero advirtió que un reconocimiento unilateral al Estado palestino en la ONU provocaría una dura respuesta israelí.
Si los palestinos logran un reconocimiento unilateral, si no en el Consejo de Seguridad, sí en la Asamblea General, eso nos conduciría a una situación completamente nueva y tendría duras repercusiones
advirtió.
Las declaraciones tienen lugar cuando se espera que el Consejo de Seguridad se reúna este lunes para discutir la petición de adhesión de los palestinos.
Israel desea conseguir una minoría de siete miembros en el Consejo de Seguridad para bloquear la iniciativa palestina. Estados Unidos ha prometido recurrir al veto en caso de que ese esfuerzo fracase. En ese caso los palestinos someterían el asunto a una votación en la Asamblea General de la ONU, donde podrían obtener una mayoría automática.
En tanto, el Cuarteto para Medio Oriente (encabezado por la ONU, la Unión Europea, Estados Unidos y Rusia) intenta restablecer las negociaciones entre Tel Aviv y los palestinos.
El cuarteto propone un acuerdo sobre fronteras y seguridad en los próximos tres meses y un acuerdo definitivo para 2012, aunque no considera las condiciones palestinas (el cese de la colonización y las fronteras previas a 1967) para que Tel Aviv y los palestino se sienten a la mesa de negociación.