n el primer semestre, unidades productivas radicadas en México vendieron al exterior productos por un valor de 171 mil millones de dólares (mdd), 16.3% de ellos petroleros y 83.7 no petroleros. En sentido inverso, ingresaron al país productos por un valor de 168 mil mdd, 12.5% de ellos petroleros y 87.5 no petroleros (Gráfico 1). Como saldo de lo anterior, la balanza petrolera externa tuvo un superávit de 6 mil 970 millones y la no petrolera un déficit de -3 mil 629 millones, para totalizar un superávit comercial de 3 mil 340 mdd, el mejor resultado de periodos similares en varios años.

Productos relevantes

Si bien la balanza agropecuaria y de alimentos presenta un déficit poco significativo de -94 millones de dólares, éste podría ser un superávit cuantioso si produjéramos internamente mucho de lo que ahora importamos. Tal es el caso de cereales, carnes, lácteos y semillas, entre otros (Gráfico 2), cuya producción no puede seguir reducida a la estrecha óptica del mercado y la ganancia, sino responder a una visión amplia de dinamización agropecuaria, empleo e ingresos rurales, seguridad alimentaria y autosuficiencia en básicos, ahorro de divisas, y al fundamental enfoque (ahora en gran descuido) de la calidad sanitaria y genética de los alimentos que consumimos (no contaminados, no alterados químicamente y no transgénicos).

No obstante el petróleo, el comercio de minerales y químicos presentó un déficit de -4 mil 455 mdd, debido a las cuantiosas importaciones de plásticos, productos químicos, farmacéuticos y derivados del caucho, consecuencia del abandono de la petroquímica y el gran atraso científico-tecnológico que caracteriza a nuestra economía.

Tampoco se justifica que el país sea deficitario en productos forestales (una riqueza renovable que aquí se confunde con depredable), o en algodón, textiles y calzado, rubros en los que hemos sido y podemos ser productores de primer orden. No se ve justificación, asímismo, al rezago en la estratégica industria siderúrgica.

Cabe reconocer, eso sí, la ampliación del superávit externo de la industria automotriz (16 mil 895 millones de dólares en el semestre), que siendo prácticamente trasnacional extranjera parece estar avanzando firmemente en una mayor integración de insumos mexicanos.

Origen y destino

De los productos exportados en el semestre, 79.1% fueron a Estados Unidos y 3.1 a Canadá. A América Latina fue 6.6%, a Europa 6.1, a Asia 4.0, a Oceanía 0.3 y a Africa el 0.2% (Gráfico 3).

A la inversa, del total de productos importados 50.6% provino de Estados Unidos y 2.7 de Canadá. De Asia importamos 29.9%, de Europa 11.7, de América Latina 4.0, de Africa 0.5 y de Oceanía 0.4%.

Así, nuestro comercio exterior es superavitario con América del Norte (en buena parte por el petróleo) y con América Latina; es deficitario con Europa, y fuertemente negativo con Asia.

UNIDAD TÉCNICA DE ECONOMÍA SA de CV • ciudad de México • Teléfono / Fax: 5135 6765 • [email protected]

http://vectoreconomico.com.mx