Buenos Aires, 1º de octubre. Sindicalistas ferroviarios, sospechosos de participar en un sabotaje, que produjo en mayo pasado el incendio de varios vagones de de trenes, fueron detenidos este fin de semana por orden de un juez federal, lo que originó un peligroso cruces de acusaciones y amenazas de paros, que se unen también a demandas gremiales contra el gobierno de la ciudad de Buenos Aires.

A solamente 22 días de las elecciones presidenciales, en las que las encuestas de opinión vaticinan que ganará cómodamente la presidenta argentina Cristina Fernández de Kirchner, se entrecruzan acciones de este tipo, marchas y demandas, cortes de calles, intento de crear caos, y también una fuerte acción mediática que contribuye a estas situaciones,

El magistrado decidió la detención del dirigente ferroviario Rubén Sobrero y otros empleados de una seccional del municipio donde se produjo el voraz incendio, que dejó pérdidas millonarias, acusándolos de integrar una asociación ilícita que actuó en esas circunstancias.

Los bomberos determinaron que el descarrilamiento de un tren, que detuvo por horas el servicio ferroviario y derivó en una protesta de quienes no podían viajar, y el incendio de vagones, no fue accidental sino que se trataba de un sabotaje. Encontraron las pruebas, y también las del incendio, que fue provocado.

Desde entonces comenzó una larga investigación sobre los grupos que actuaron y que se diferenciaban de los que habitualmente toman el tren en el lugar.

Los investigadores siguieron rastros, entre ellos comunicaciones telefónicas y declaraciones de algunos detenidos, ante lo cual se decidió seis meses después la aprehensión de Sobrero, el vocero de prensa Leonardo Portorreal y otros trabajadores, además de los tres que ya están detenidos.

Ayer hubo un paro en el ferrocarril Sarmiento, la línea donde trabajan los detenidos, quienes han militado en distintos sectores de la izquierda más radicalizada.

Ante una serie de demandas, el juez federal de San Martín, Juan Manuel Yali, decidió adelantar las indagatoria para este domingo.

Abogados de los detenidos hablan de persecución gremial sobre este grupo que se opone a la dirigencia de José Pedraza, secretario de la Unión Ferroviara, detenido en espera del juicio oral, junto con algunos de sus compañeros, por el asesinato de Mariano Ferreyra, un militante del Partido Obrero, durante un enfrentamiento y cuando éste estaba apoyando a trabajadores contratados que cortaban una vía del ferrocarril Roca, en octubre de 2010.

Sobrero, de Izquierda Socialista, es conocido como dirigente de base, que además reclama la restatización de los ferrocarriles privatizados en los años 90.

Escalada antisindical: CGT

Mientras, la dirigencia de la oficialista Confederación General del Trabajo (CGT) repudió hoy las detenciones de los ferroviarios y denunció una escalada judicial contra la actividad sindical.

Llama poderosamente la atención la facilidad con que la justicia actúa sobre los dirigentes gremiales, cualquiera sea su trayectoria o ideología política, dice un comunicado firmado por el secretario general Hugo Moyano, ligado al gobierno nacional.

Recordó también que la central obrera interpretó en su momento que los incidentes violentos en las estaciones Haedo y Constitución eran parte de un “operativo de caos, tendiente a intranquilizar a la población y desestabilizar al gobierno nacional”.

Agrega el texto: La CGT rechaza la detención de los delegados ferroviarios y advierte que continúa la escalada contra la actividad sindical sin importar el color político de los perseguidos.

Delegados de la línea Sarmiento confirmaron que el servicio funcionará de forma normal todo el fin de semana y adelantaron que el lunes los trabajadores de ese sector marcharán hacia los tribunales de San Martín y a la Plaza de Mayo para repudiar la detención de cinco sindicalistas.

Otro tema fuerte en lo sindical es la huelga anunciada por los educadores de esta capital para rechazar el intento del jefe de gobierno, el empresario Mauricio Macri, de eliminar las juntas encargadas de los concursos, en las que participan los sindicatos.

Se intenta remplazarlas imponiendo una dependencia manejada por el gobierno local y terminar con una histórica conquista de los docentes, que están ahora en pie de guerra. No son los únicos conflictos, los que hacen suponer que esta semana será caliente.