Senadores de PRI y PRD advirtieron que el gobierno de Felipe Calderón debe revisar los protocolos de seguridad en materia de transporte aéreo de los funcionarios federales, luego de la muerte de dos secretarios de Gobernación en este sexenio y uno de Seguridad Pública en la pasada administración, los tres en accidentes al desplomarse las aeronaves en que viajaban.

En estas condiciones de inseguridad y violencia que vive el país, provocadas por el crimen organizado, la Presidencia de la República debe tener protocolos de seguridad muy estrictos, consideró el senador priísta Francisco Arroyo.

Aparatos viejos

Resaltó que además las aeronaves son muy viejas, por lo que el gobierno federal debe tomar todas las precauciones habidas y por haber, de tal suerte que sean los pilotos quienes tomen la decisión de volar y no una eventual orden de carácter administrativo.

Insistió: quiero decir que necesitamos protocolos más estrictos y una visión muy precisa del estado de las aeronaves y de su antigüedad, para que no ocurran más accidentes trágicos como éste en que perdieron la vida el titular de Gobernación, José Francisco Blake, y sus acompañantes.

Por separado, el senador del PRD Arturo Núñez dijo que la muerte de tres secretarios de Estado en un lapso tan corto llama la atención y da derecho a expresar dudas sobre la seguridad del transporte aéreo de los servidores públicos.

Agregó que se debe conformar un grupo multidisciplinario que esclarezca plenamente a satisfacción qué es lo que está pasando, si es un problema de mantenimiento de los equipos, de no respetar las condiciones climatológicas o falta de pericia de la tripulación.

El senador priísta Carlos Jiménez Macías consideró que es fundamental que se investiguen todas las hipótesis en torno al percance y se informe a la opinión publica de manera clara, con el fin de evitar rumores y versiones que sólo crean más confusión.