Cancún, QR, 23 de noviembre. El precandidato presidencial único de la izquierda, Andrés Manuel López Obrador, dijo estar dispuesto a no aparecer en radio ni televisión durante los dos meses de la precampaña, porque no somos marrulleros ni estamos por la simulación.

En entrevista que concedió a su llegada a este centro vacacional, precisó que sí hará precampaña, aunque sus actos no se difundan en la televisión ni en la radio en los tiempos oficiales que corresponden a los partidos de la Revolución Democrática, del Trabajo y Movimiento Ciudadano, que lo postulan.

Sin embargo, aclaró que tampoco puede garantizar que un ciudadano, en uso de sus derechos, decida inscribirse y postularse como precandidato presidencial de esas fuerzas políticas.

Lo anterior –dijo–, para acabar con la controversia que provocó su propuesta de que se inscriban como precandidatos presidenciales los dirigentes nacionales de los tres partidos que lo impulsan, para tener acceso a los tiempos oficiales en los medios electrónicos, del 18 de diciembre al 15 de febrero.

Previo a una reunión de evaluación con integrantes de los comités municipales y seccionales del Movimiento Regeneración Nacional en Quintana Roo, precisó que su decisión tiene también el objetivo de evitar que sigan tergiversando su propuesta los medios de comunicación al servicio del PRI y de su precandidato presidencial, Enrique Peña Nieto.

El precandidato presidencial de PRD, PT y Movimiento Ciudadano, Andrés Manuel López Obrador, a su llegada al puerto de CancúnFoto Luis Pérez Soto

Con el objetivo de fomentar el turismo, López Obrador propuso la construcción de un tren bala en la Ruta Maya, que atravesaría Quintana Roo, Yucatán, Campeche, Tabasco y Chiapas, para lo cual se necesitaría una inversión de 60 mil millones de pesos. Ya se cuenta con el anteproyecto, y en caso de ganar la Presidencia de la República –dijo– se construiría en una plazo de tres años.

Más tarde, en Mérida, Yucatán, el precandidato se reunió con empresarios, a quienes planteó parte de su programa económico y les pidió su voto de confianza para impedir que la mafia política se apodere del país.

Manifestó que no está en contra del sector, y una muestra de ello son las reuniones que efectúa con gente de negocios. Los empresarios que generan riqueza sin explotar a la gente siempre serán bienvenidos en mi gobierno, dijo en alusión a su hipotético arribo a Los Pinos.

Destacó que los comicios de 2012 estarán enmarcados por leyes electorales pobres y poco confiables, una vez que el Instituto Federal Electoral ha demostrado que está al servicio de los poderosos intereses, y no al lado del pueblo y de sus votantes.