El titular de la Secretaría de Gobernación, Alejandro Poiré Romero, reconoció que cerca de 70 por ciento de los reos federales se encuentran actualmente en cárceles estatales.

Dos días después de la fuga y muerte de internos en el penal de Apodaca, Nuevo León, el funcionario cambió de última hora el tema de una conferencia de prensa convocada originalmente para hablar de asuntos electorales y subrayó la responsabilidad de los gobiernos estatales en este tipo de incidentes carcelarios.

Aunque de manera implícita reconoció que el gobierno federal tiene también rezagos, dijo que ante la problemática penitenciaria de los estados la administración calderonista ya ha puesto su parte.

En toda la administración (de Calderón) no se ha presentado ni uno solo de estos incidentes en ninguno de los penales federales, ni uno solo, expresó. Resaltó también que en cárceles federales hay internos de gran peligrosidad del fuero común, como los secuestradores.

Estamos asumiendo la responsabilidad que nos corresponde al revertir esta tendencia histórica. Lo estamos haciendo muy rápido y sin incidentes en penales federales, dijo.

Señaló que al término del sexenio (dentro de nueve meses) estarán listos ocho nuevos centros penitenciarios, con lo que se solucionará el problema de tener en cárceles estatales a miles de reos procesados por delitos federales. No obstante, enseguida admitió que la edificación de más cárceles no quita el problema de la corrupción en los penales.

El desmarque de Poiré –de casos como el de Apodaca– incluyó la declaración de que la Federación entrega recursos a los estados para la manutención de los presos federales y para el desarrollo de la infraestructura carcelaria.

Si bien el titular de Gobernación no ofreció la cifra exacta de presos federales que actualmente cumplen sentencia en cárceles estatales, hizo la referencia a lo que han avanzado en este sexenio. En consecuencia, de la propia frase del secretario se puede deducir el rezago que persiste en el último tramo del sexenio.

Hoy día, del total de reos, 47 mil son del fuero federal y de ésos ya llevamos más de 18 mil en el ámbito federal; es decir, ya tenemos arriba del treinta y tantos por ciento del total de reos federales en el fuero federal, dijo.

Poiré Romero tampoco respondió cuánto costará –y de dónde se obtendrán los recursos– concluir el proyecto de construcción de centros donde se reubicaría en los próximos meses a por lo menos 30 mil reos que son responsabilidad del gobierno federal, incluida la rehabilitación de las Islas Marías y la ampliación de los centros federales existentes.

Espero tener ese dato por aquí. Es, ahora sí, de los que debe uno de tener, ¿verdad? No, no lo tengo en este momento, aceptó el funcionario, al tiempo de barajar insistentemente las tarjetas que tenía en el atril de la sala de conferencias. Casi al final de ésta le acercaron otros documentos y pudo decir que la edificación de ocho penales tendrá un costo de 32 mil 822 millones de pesos para generar más de 20 mil espacios dentro del ámbito federal.

En 2006 –presumió– había seis centros federales y en diciembre 2011 ya estaban en funcionamiento12. Es decir, al inicio de la presente administración sólo había 3 mil 164 reos del fuero federal en cárceles de este nivel de gobierno y actualmente son 18 mil 283, un incremento prácticamente de cinco veces.