Ginebra, 9 de marzo. La Comisión Internacional de Investigación sobre Libia anunció hoy en un informe sobre los efectos de los bombardeos de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) en Libia, el año pasado, que 60 civiles murieron y 55 resultaron heridos bajo el fuego de los aviones occidentales, tan sólo en cinco de 20 ataques analizados.

El presidente de la comisión, el juez Philippe Kirsch, que presentó su informe final al Consejo de los Derechos Humanos, indicó que aunque la OTAN haya indicado que tomó todas las precauciones necesarias para proteger a los civiles, la comisión no recibió suficientes informaciones para verificar los hechos de manera independiente y recomienda un complemento de investigación.

En el informe final se concluye que de los 20 ataques de la OTAN analizados, la comisión registró cinco ataques en los que 60 civiles en total murieron y otros 55 resultaron heridos.

Otros dos ataques dañaron infraestructuras civiles sin que ningún objetivo militar haya sido identificado, agrega el informe.

Pese a estos datos, el reporte concluye que la OTAN llevó a cabo una campaña muy precisa con una determinación notable para evitar las pérdidas civiles.

Kirsch reveló que la comisión es consciente del hecho de que a veces en los bombardeos militares hay civiles que mueren, sin embargo no pudo concluir en los casos mencionados que la OTAN tomó todas las precauciones necesarias para proteger a los civiles, como debía hacerlo.

Los ataques de naves francesas comenzaron el 17 de marzo del año pasado, seguidos de bombardeos de Gran Bretaña y Estados Unidos, hasta que finalmente el 31 de abril las operaciones quedaron bajo la coordinación de la OTAN, que ordenó cientos de operaciones sobre Libia durante siete meses.

El informe final señaló que el gobierno libio deformó balances de víctimas civiles imputados a los bombardeos de la Alianza Atlántica.

Varias acusaciones contra la OTAN analizadas por la comisión eran exageradas o eran un intento deliberado de desinformación, señaló el informe.

La comisión afirmó igualmente que recibió un informe creíble que relata la forma en que tropas libias trasladaron cadáveres de niños desde una morgue hacia el sitio donde previamente ocurrió un bombardeo de la OTAN.