Lunes 3 de septiembre de 2012, p. 40
Islamabad. El imán que acusó de blasfemia a la adolescente cristiana Rimsha fue detenido por la policía, que lo acusa de haber falsificado pruebas. Rimsha lleva más de dos semanas en la cárcel por haber quemado unas páginas del libro Noorani Qaïda, manual de introducción al islam para niños que contiene versículos del Corán, según denuncias de algunos vecinos. El sábado, un juez paquistaní decidió aplazar hasta este lunes la audiencia prevista para decidir sobre la liberación condicional de la joven, porque existen dudas sobre la validez de los documentos presentados. En Pakistán la quema de versículos del Corán se castiga con cadena perpetua.