A partir de este año el país también comprará turbosina
Lunes 22 de octubre de 2012, p. 28
Pese a la riqueza petrolera de México, por lo menos en los próximos 14 años el país no será autosuficiente en la elaboración de productos petrolíferos, principalmente gasolinas y ahora también de turbosina con lo que continuara la dependencia del exterior, según revelan informes oficiales de la Secretaría de Energía (Sener).
Según la Prospectiva del mercado de hidrocarburos (2012-2026), se estima que la demanda de gasolinas seguirá superior a la producción, pese a las reconfiguraciones, adiciones de capacidad programadas y planeadas, como la construcción de la Refinería Bicentenerario.
Se prevé que continúen las importaciones de gasolina, por lo que el saldo comercial de este petrolífero se deteriorará en forna creciente.
Con base en las proyecciones de demanda, durante el periodo 2011-2026, las importaciones de gasolina crecerán 3.4 por ciento promedio anual.
Así, el déficit en la balanza comercial pasará de 404.7 millones de dólares 2011 a 610.2 millones en 2026. En 2011, las importaciones de este combustible representaron 50.6 por ciento de la demanda interna. En 2026, la producción de gasolinas sólo cubrirá 51.3 por ciento de la demanda nacional y 48.7 serán importaciones.
Durante el periodo 2011-2026, la demanda de gasolinas crecerá 3.7 por ciento promedio anual. El sector autotransporte consumirá 99.9 por ciento de ese volumen en 2026. En este sector, se estima que la demanda de Pemex Magna representará 91.4 por ciento, derivado del aumento esperado en el parque vehicular, así como al diferencial de precios respecto a la Pemex Premium.
Entre 2011 y 2026, se espera un incremento de 6.6 por ciento promedio anual en el parque vehicular a gasolina. Esto se traducirá en un crecimiento promedio anual de 3.7 por ciento en la demanda de este combustible en el sector autotransporte.
Respecto al combustible para el transporte aéreo, las perspectivas del mercado indican que habrá déficit a lo largo del periodo de proyección (2012-2026). Así, a partir de 2012, México se convertirá en importador de turbosina, cuando en el pasado fue autosuficiente e incluso exportador.
Respecto a la demanda futura de turbosina, el transporte aéreo continuará siendo el único consumidor de este combustible. Al término de 2026, el gasto de turbosina será de 101 mil 200 barriles diarios, lo que implicará un crecimiento promedio anual de 4.0 por ciento.
Los informes oficiales señalan que las importaciones de turbosina mostrarán una tendencia ascendente, al pasar de 900 barriles diarios en 2012 a 30 mil 800 barriles diarios en 2026.