El debate sobre la legalización de drogas podría empezar a finales de este año, y deberá ser convocado por Miguel Ángel Mancera, una vez que asuma el cargo de jefe de Gobierno, lo que sentaría el precedente de marcar la agenda nacional en ese tema al presidente electo, Enrique Peña Nieto, aseguró el diputado local y coordinador de la fracción del PAN en la Asamblea Legislativa, Federico Döring Casar.

En entrevista, resaltó que la sociedad capitalina está preparada para iniciar ese tipo de disertaciones. Puso énfasis en que ese debate no tiene que ser de falsa moral, sino de salud pública.

–¿Hasta qué punto puede expandirse a otras entidades el debate sobre ese tema en el DF?

–Si lo hace la Asamblea Legislativa no repercutirá gran cosa, y ya se vio con asuntos polémicos como los matrimonios del mismo sexo, u otros temas, que fue como una definición de la Asamblea o de la izquierda, pero no tuvo o no fue agenda nacional, pero si lo convoca Miguel Ángel Mancera, puede ser un tema que imponga la agenda a Peña Nieto y sea un referente de la agenda nacional.

El líder de la bancada panista destacó que en esta capital se tienen herramientas muy valiosas que no llegan a tener otros estados: los mecanismos de participación ciudadana. “Por poner un ejemplo, un referendo en la ciudad de México sobre legalizar o no las drogas, en el que participen decenas o centenas de miles de personas, no es asunto menor.

Si los habitantes del Distrito Federal se pronuncian en uno u otro sentido, después de mucha información, evidentemente que va a ser tema que no puede soslayar Peña Nieto, y lo llevaría a analizar la posibilidad de una consulta nacional sobre ese tema o tomar una postura legislativa al respecto, añadió.

–¿La Asamblea Legislativa puede generar una iniciativa de iniciativas en ese asunto?

–Si contamos con información y sabemos cuál es la postura del jefe de Gobierno entrante, es factible; lo que no puede hacer la Asamblea es querer iniciar el debate y querer definir la agenda nacional, porque entonces va a perder fortaleza esa discusión.

Si lo hace el Ejecutivo local se puede volver agenda nacional, y si lo hace la ALDF puede ser la agenda de una mayoría.