Pide a los ciudadanos de ese estado tener confianza en las acciones emprendidas
Viernes 26 de julio de 2013, p. 5
Antón Lizardo, Ver., 25 de julio.
En Michocán hay regiones ‘‘lamentablemente’’ en poder del crimen organizado, admitió el presidente Enrique Peña Nieto. Anunció entonces mayor coordinación de las fuerzas federales con la autoridad local para continuar el operativo de seguridad puesto en marcha y lograr así ‘‘una recuperación territorial de la zona’’.
El titular del Ejecutivo pidió a los michoacanos tener confianza en las acciones emprendidas para, en el mediano plazo, recuperar la seguridad. Resaltó la ‘‘condición interna’’ de aquella entidad por las licencias concedidas al gobernador Fausto Vallejo y ofreció respaldo al mandatario interino, Jesús Reyna.
‘‘La nuestra es una presencia para contener al crimen organizado, para restablecer el control territorial en Michoacán, pero también es importante que la autoridad tenga capacidad de dar respuesta a demandas sociales’’, pues los cuerpos de seguridad no pueden suplir a las autoridades del orden en la atención a las necesidades de la población.
Debilitamiento local
Y respecto a la diseminación de los grupos delincuenciales en algunas zonas de Michoacán, aceptó: ‘‘Creo que se ha perdido... que ha habido espacios que se han dejado o que ha ganado lamentablemente el crimen organizado, y por eso tenemos el operativo que se inició hace varias semanas que tiene por propósito recuperar el control en la zona donde hay un debilitamiento de las autoridades locales, fundamentalmente’’.
Desde su visión, los hechos de violencia en aquella entidad representan una reacción de la delincuencia ‘‘ante una presencia que hemos mantenido de manera consistente y que seguiremos teniendo en tanto no regresen las condiciones de normalidad’’, y de ahí las emboscadas de esos grupos contra la Policía Federal.
Asimismo, aceptó que el conflicto generado por la delincuencia en Michoacán se ha pasado a otras entidades como Guerrero y el estado de México. Sin embargo, en apoyo a la estrategia de su administración, hay otras –aseguró– donde ‘‘vamos avanzando’’ y hay ‘‘sensible disminución de violencia’’, como en Chihuahua y Nuevo León.
De este modo, hoy Michoacán se convirtió en tema central del discurso y las declaraciones del jefe del Ejecutivo. En la Heroica Escuela Naval, durante la graduación de guardiamarinas, aseguró que su gobierno trabaja para regresar la paz y la tranquilidad a esa entidad, la cual ‘‘tiene y tendrá’’ el respaldo de la Federación para ‘‘asegurar el estado de derecho’’.
Puntualizó: ‘‘He dado instrucciones precisas a las diferentes instancias encargadas de la seguridad: la Policía Federal, la Procuraduría General de la República y a las fuerzas armadas, para reforzar nuestro apoyo a las autoridades locales’’.
Más tarde, en el vuelo de regreso a la capital del país, Peña Nieto habló de la necesidad de realizar un proceso en Michoacán de fortalecimiento institucional y de revisión de las policías locales.
Las acciones de la delincuencia organizada en diversos estados forman parte del análisis y diagnóstico del gobierno federal para aplicar la nueva estrategia de seguridad y lograr su ‘‘debilitamiento’’. Por ello, habló de nuevo del año solicitado por él para hacer la evaluación correspondiente. Por ahora, insistió, ‘‘Michoacán es un estado donde se está prestando una atención prioritaria’’.
En la ceremonia en el plantel de Antón Lizardo –y donde por primera vez se graduaron 21 mujeres de las distintas carreras navales–, Peña Nieto felicitó de nuevo a la Marina por la aprehensión, ‘‘sin disparar ni un tiro’’, de Miguel Ángel Treviño, El Z-40.
Su detención reafirma el compromiso del gobierno con el estado de derecho y la reducción de la violencia, objetivos ‘‘para muchos incompatibles’’, aunque acciones como esa, aseguró, ‘‘demuestran que son claramente alcanzables’’.
En este acto estuvieron también el gobernador de Veracruz, Javier Duarte; el secretario de la Defensa, general Salvador Cienfuegos Zepeda, y el procurador general de la República, Jesús Murillo Karam.