El Cairo, 21 de agosto.

Un tribunal egipcio ordenó hoy la libertad condicional para el ex presidente Hosni Mubarak, derrocado en 2011 por una rebelión popular, mientras la Unión Europea (UE) suspendió la entrega de equipo de seguridad al gobierno impuesto por los militares en Egipto, pero mantendrá la ayuda a la población.

El gobierno instalado por los militares tras el golpe del 3 de julio pasado ordenó que en caso de ser liberado, Mubarak quede en arresto domiciliario, tal como lo autoriza la ley sobre el estado de emergencia restablecido la semana pasada, según anunciaron las autoridades.

Un tribunal ordenó poner en libertad al ex gobernante luego que sus abogados presentaron una apelación, en el contexto de uno de los casos por corrupción que se le sigue. El ex mandatario sigue siendo enjuiciado por otras causas.

La decisión se adoptó durante una audiencia del juicio a Mubarak por acusaciones de que aceptó obsequios indebidos de un diario estatal, el último de los casos que mantienen encarcelado al ex gobernante.

Por otro lado, continuaron hoy las detenciones de líderes de la Hermandad Musulmana, entre ellos el vocero del Partido de la Libertad y la Justicia (PLJ), Murad Ali, y el predicador Safwat Hegazy. Pese a todo, la organización religiosa convocó a grandes manifestaciones para el viernes de los mártires en apoyo al derrocado presidente Mohamed Mursi.

Desde el golpe contra Mursi las fuerzas de seguridad decretaron el estado de emergencia y detuvieron a miles de simpatizantes de la Hermandad Musulmana, incluido su guía supremo, Mohamed Badie, capturado el martes.

La UE, en tanto, decidió suspender las licencias de exportación de todas las armas y material de seguridad que pueda ser utilizado en la represión interna, indicó el documento de conclusiones de la reunión de ministros del Exterior de los países del bloque, que se celebró en Bruselas.

También se acordó revisar la asistencia financiera, aunque se mantendrá el apoyo a los grupos vulnerables y a la sociedad civil, dijo la jefa de la diplomacia europea, Catherine Ashton, quien pidió cambios políticos rápidos en Egipto y la implementación de una hoja de ruta que devuelva al país a la senda de un proceso democrático.