Ciudad del Vaticano, 15 de enero.

El papa Francisco restructuró hoy la dirección del Instituto para las Obras de Religión (IOR), conocido como el Banco del Vaticano, con la remoción de cuatro de los cinco cardenales de un comité de supervisión, con lo que busca solucionar los problemas de una institución plagada de escándalos.

Los cuatro cardenales fueron removidos apenas 11 meses después de que se iniciaron sus mandatos de cinco años como comisarios durante el papado de Benedicto XVI, quien renunció en febrero de 2013.

Entre los remplazados figura el ex secretario de Estado, Tarcisio Bertone, responsable de muchas de las fallas administrativas en el Vaticano en la era Ratzinger.

En otro escándalo, el Vaticano dará explicaciones por primera vez este jueves a expertos del Comité de la Convención de la Organización de Naciones Unidas sobre Derechos de la Infancia, acerca de los abusos sexuales cometidos contra menores por religiosos.