En la nueva estrategia de seguridad para Michoacán el gobierno federal contempla la creación de un cuerpo policial estatal similar al que opera en Nuevo León, denominado Fuerza Civil, que estará integrado por personal altamente calificado y examinado para evitar actos de corrupción o vínculos con el crimen organizado. A esta nueva corporación –que tardará meses en conformarse– se invitará a los miembros de grupos de autodefensa, revelaron funcionarios que participan en el gabinete de seguridad nacional.

Uno de los principales operadores de la nueva estrategia para Michoacán será Monte Alejandro Rubido García, quien funge como titular del secretariado ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SNSP) y quien en 1989 fue uno de los fundadores del Centro de Investigación y Seguridad Nacional (Cisen), donde alcanzó el rango de secretario general del organismo y fue director del área de Análisis Estratégico y de Investigación.

Rubido García es especialista en contrainteligencia y combate de grupos armados; tomó cursos de capacitación con el servicio de inteligencia israelí (Mossad), el servicio de inteligencia británico (M-16) y diversas agencias estadunidenses.

En ese contexto, los funcionarios consultados indicaron que la política de desarme instrumentada por el Ejército Mexicano tiene la finalidad de identificar a quienes actúan de ‘‘buena fe’’ en los grupos de autodefensa, los cuales se han extendido a más de 15 municipios michoacanos; con estas acciones, precisaron, también se podrá conocer quiénes podrían tener intereses vinculados con alguna organización criminal, como el cártel Jalisco Nueva Generación o Los caballeros templarios.

La estrategia se pondrá en marcha tras la designación de Alfredo Castillo Cervantes como titular de la Comisión para la Seguridad y el Desarrollo Integral en el estado de Michoacán, quien será el articulador de todas las acciones e integración de las autoridades de los tres niveles, y podrá disponer de los elementos de la Policía Federal y de las fuerzas armadas para realizar operativos de combate y detención.

La estrategia se sustentará en el diagnóstico que el presidente Enrique Peña Nieto encargó a las instituciones castrenses de inteligencia y seguridad pública.