La Secretaría de Educación Pública (SEP) emitió tres documentos de base a fin de orientar la discusión de los foros de consulta sobre el modelo educativo, del cual, reconoce la dependencia, habrá que transformar lo que es obsoleto y traba su avance.

Los lineamientos, uno por nivel educativo –básica, media superior y educación normal–, señalan que uno de los objetivos centrales de la reforma educativa es garantizar una formación de calidad, equidad e inclusión.

Sin embargo, entre las propuestas que se presentan como ejes de la discusión se incluye definir qué constituye lo básico indispensable que un mexicano debe saber para insertarse como ciudadano activo y productivo.

Además, la SEP propone someter a discusión las definiciones del artículo tercero constitucional como fundamento de la educación básica, pero también considerar un perfil del egresado de este nivel educativo, analizar la estructura curricular y los materiales educativos.

Se solicita que quienes participen en los 18 encuentros estatales y tres nacionales que se realizarán de febrero a junio próximo debatan sobre los conocimientos, habilidad y valores que se deben adquirir y desarrollar al cursar del prescolar a la secundaria para seguir aprendiendo a lo largo de la vida, pero también para tener una convivencia pacífica.

La escuela y su organización también serán sujetas a reflexión, pues la SEP considera que ha sido el último eslabón de una cadena vertical de mando.

En cuanto a la capacitación de los maestros, señala que a lo largo de muchos años recibieron cantidades ingentes de cursos ajenos a las necesidades específicas de su labor cotidiana y que no han traído una mejora en su práctica docente. Es tiempo de transformar ese persistente error, admite.

Otro de los temas que deberá ser abordado en la revisión del modelo educativo, es la formación inicial de maestros, por lo que se propone la elaboración de un plan integral de diagnóstico, rediseño y fortalecimiento del sistema de normales públicas.

La SEP reconoce que en casi tres décadas los programa de mejora de la educación normal en México no han logrado impactar en el cambio de las prácticas docentes de las normales, pues se apoyó en infraestructura física y tecnológica, pero sin contar con programas efectivos de mejora del profesorado.

Subraya que las instituciones normalistas serán una opción para la formación inicial de maestros, ya que otras las instituciones de educación superior podrán ofertar programas autorizados, así como participar en procesos formativos o de actualización docente.