Vigilar continuamente la actividad física es fundamental en pacientes con enfermedades como diabetes, insomnio, depresión y sarcopenia (pérdida degenerativa de la masa muscular y de la fuerza al envejecer, que también se puede presentar en personas con una vida sedentaria); así como en atletas de diversos deportes.

Por ello, especialistas en ingeniería biomédica de las universidades Nacional Autónoma de México (UNAM) y de Guanajuato (Ugto) trabajan en el diseño de tres sistemas de registro para ese importante monitoreo.

Si bien están pensados para personas diabéticas, a quienes como parte de su terapia se les propone un cambio en el estilo de vida, estos diseños también podrán ser empleados en diferentes patologías. En la elaboración de estos sistemas participan los académicos Juan Manuel Gómez, de la Facultad de Ingeniería (FI) de la UNAM, y Arturo Vega, de la Ugto, así como la estudiante Paola Corona Téllez.

El profesor de la UNAM, quien es responsable del proyecto, explicó que para saber el estado de salud, primero es necesario determinar si la actividad física diaria contribuye, y qué tanto lo hace, con la que se requiere para estar sano.

Estos desarrollos se basan en acelerómetros tri-axiales digitales, para medir y graficar la fuerza, la velocidad y en ángulo con que se flexionan ambos brazos y piernas. Hasta ahora, los universitarios han logrado diseñar la instrumentación de dos acelerómetros tri-axiales digitales, que son dispositivos pequeños que permiten evaluar la velocidad y el ángulo de movimiento de las articulaciones en personas en general y, en particular, con sarcopenia.

También han desarrollado un sensor electro-hidráulico para medir el movimiento en las extremidades superiores o inferiores. Y trabajan en el desarrollo de los sensores de la temperatura, del ritmo cardiaco y de luminosidad.

Gómez explicó que estos aparatos no sólo permitirán medir el esfuerzo físico, sino también temperatura, ritmo cardiaco y luminosidad a que estará expuesto el paciente o el deportista. Con los datos que se generen de estas variables, el médico podrá saber qué consumo calórico tuvo su paciente diabético, cómo está su metabolismo y cómo evoluciona.

Asimismo, podrán usarse en quienes padecen depresión, para saber qué tanto están afectados, o en quienes sufren insomnio, para determinar si están (y cuánto) despiertos durante la noche. También tendrá aplicación en cronobiología y en rehabilitación.

Para el equipo de investigación hay varios retos: que el sistema tenga alimentación continua (debe funcionar permanentemente o al menos siete días para registrar la actividad física y las otras variables), que cuente con capacidad de memoria (debe ser suficientemente grande para almacenamiento de datos), que pueda contectarse a Internet (para que los datos que genera el paciente o deportista puedan estar a la mano del médico o del entrenador), que sea fácil de portar y económico, entre otros.

La UNAM informó que en el mercado existen diversos dispositivos para medir actividad física y otros parámetros, pero no hay uno que cumpla con todo el proceso que se requiere para el monitoreo continuo de estos pacientes, como el que diseñan ambas casas de estudios.