Domingo 1º de marzo de 2015, p. 31
José, conocido como el pequeño niño guerrero y que fue uno de los bebés que resultaron con quemaduras por la explosión ocurrida el 29 de enero en el Hospital Materno Infantil de Cuajimalpa, regresó ayer sábado a la ciudad de México procedente de Estados Unidos, en buen estado de salud y a partir de ahora recibirá atención médica en el Pediátrico de Tacubaya.
Un par de días después del siniestro, el pequeño fue trasladado al hospital Shriners, en Galveston, Texas, para su atención.
En un comunicado, el Gobierno del Distrito Federal detalló que José nació el 26 de noviembre de 2014, pero que debido a un problema respiratorio se encontraba internado en el Materno Infantil de Cuajimalpa.
Informó que se hará cargo de todos los gastos que implique su rehabilitación, y que mediante el Instituto de Vivienda del Distrito Federal se entregará a su mamá una casa, la cual será amueblada por la Secretaría de Salud local. Mientras que el Sistema para del Desarrollo Integral de la Familia del Distrito Federal cada semana, durante seis meses, le entregará despensas y le dará becas escolares a sus hermanos, de tres y seis años.
En apoyo a la familia, la Secretaría de Salud contrató el 16 de febrero a la mamá y al abuelo de José. Aunque durante los próximos cuatro meses, ella contará con un permiso para dedicarse al cuidado de su hijo.
Por su parte, la empresa de Gas Express Nieto, responsable de la explosión, dijo que concluyó el proceso de indemnización de las familias de las cinco personas que perdieron la vida.
En un comunicado la empresa aseguró que su prioridad ha sido, en todo momento, acompañar a los afectados y a sus familias.