Viernes 11 de septiembre de 2015, p. 32
Washington.
Demócratas en el Senado de Estados Unidos lograron bloquear este jueves un intento de la bancada republicana por hundir el acuerdo nuclear con Irán, lo que otorgó al presidente Barack Obama una importante victoria en política exterior.
Un total de 42 demócratas e independientes votaron contra una medida para hacer avanzar el proyecto republicano de desaprobación del pacto con Teherán, lo que significa que quienes se oponen al acuerdo fueron incapaces de obtener los 60 votos necesarios en la cámara de 100 miembros para sacar adelante la resolución.
Según los demócratas, la votación pone fin a los esfuerzos del Congreso controlado por los republicanos para descarrilar el acuerdo nuclear, sellado entre Irán y el Grupo de los 5 más 1 (Estados Unidos, Francia, Reino Unido, Rusia y China, miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la Organización de Naciones Unidas, más Alemania).
De haber sido exitosa la resolución republicana, Obama no habría podido levantar en el futuro las sanciones estadunidenses a Irán, cruciales para el acuerdo nuclear, con el que las potencias tienen garantías de que la república islámica no desarrollará la bomba atómica.
Mitch McConnell, líder de la mayoría republicana en el Senado, adoptó medidas de inmediato para allanar el camino a otra votación en el Senado. Revisitaremos el asunto la próxima semana y veremos si hay alguien que quiera cambiar de opinión
, indicó.
El Congreso tiene 60 días –que concluyen el 17 de septiembre– para aprobar una resolución que rechace el acuerdo con Irán.
Hillary Clinton defiende acuerdo
La precandidata demócrata a la presidencia, Hillary Clinton, defendió este miércoles el acuerdo nuclear con Irán, y aseguró que es un texto sólido
que deber ser aplicado con firmeza. ¿Es perfecto? Claro que no. ¿Es un acuerdo sólido? Sí... Por esta razón apoyo este acuerdo
, dijo la ex secretaria de Estado (2009-2013) en el centro de investigación Institución Brookings, en Washington.
Aseguró que el acuerdo no pone en riesgo a Israel y, por el contrario, aporta al desarrollo de su seguridad.
El acuerdo tiene como objetivo garantizar el carácter pacífico del programa nuclear iraní, con restricciones durante al menos diez años, a cambio del levantamiento progresivo y reversible de las sanciones económicas.