Martes 22 de noviembre de 2016, p. 2
Madrid. Minuciosos experimentos en ratones libres de gérmenes muestran la importancia de comer fibra natural para proteger la barrera vital del moco del tracto digestivo, evitando que la microbiota ingiera el revestimiento del colon y protegiendo contra la infección, como se detalla en un artículo publicado en Cell. Cuando los microbios en el sistema digestivo no obtienen la fibra natural de la que dependen para obtener alimentos, comienzan a mascar la capa natural de moco que recubre el intestino, erosionándolo hasta el punto en el que peligrosas bacterias invasoras pueden infectar la pared del colon. Un equipo internacional de investigadores muestra el impacto de la privación de fibra en los intestinos de ratones especialmente criados, sin microbios intestinales propios; luego recibieron un trasplante de 14 bacterias que normalmente crecen en el intestino humano.