Washington.

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dijo que si continúa el punto muerto en las negociaciones sobre la paralización parcial del gobierno federal, los republicanos podrían financiar al gobierno cambiando las reglas del Senado, que actualmente requiere de una mayoría calificada para que avance una legislación.

“Los demócratas sólo quieren que los inmigrantes lleguen a nuestro país sin documentos. Si el punto muerto continúa, los republicanos deberían ir por el 51 por ciento (la opción nuclear) y votar por un presupuesto real y de largo plazo”, señaló Trump en Twitter.

El reglamento interior del Senado –compuesto por 100 miembros– estipula que para cada moción, todos los senadores tienen derecho a objetar y que esta objeción sólo puede ser superada con el voto de las tres quintas partes del Senado, 60 de 100, para que una legislación supere obstáculos de procedimiento y avance.

Tomar la opción nuclear significaría que proyectos de ley puedan ser aprobados con una mayoría simple de 51 votos y no los 60 requeridos normalmente. Los republicanos cuentan con 51 bancas en el Senado.

La propuesta de recurrir a la opción nuclear fue rechazada por el líder republicano del senado, Mitch McConell. La Conferencia Republicana se opone a cambiar las reglas sobre legislación, aseguró en un correo electrónico.

El líder republicano señaló que hoy (este domingo) sería el día justo para ponerle fin al cierre del gobierno, y advirtió que si no hay acuerdo la situación podría derivar en algo mucho peor.

Tras denunciar un error de cálculo de gigantescas proporciones de los demócratas, McConnell los exhortó a terminar con la parálisis de la administración durante la votación de este lunes al mediodía.

El jefe de los senadores demócratas, Chuck Summer, recordó que es la primera vez que se produce un cierre del gobierno federal en Estados Unidos cuando la Casa Blanca, y ambas cámaras del Congreso están controladas por el mismo partido.

No logran siquiera ponerse de acuerdo con su propio presidente (...) Nosotros, los demócratas, estamos listos para sentarnos en la mesa de negociaciones. El presidente debe tomar una silla, agregó.

Mick Mulvaney, director de presupuesto de la Casa Blanca, advirtió en Fox News que en caso de fracasar las negociaciones bipartidistas, el cierre podría durar varios días. Además, denunció una maniobra política de algunos demócratas que, según él, buscan alargar el cierre hasta el día en que se prevé celebrar el discurso del Estado de la Unión, el 30 de enero, momento en que el gobierno explica al pueblo estadunidense sus prioridades para el año que empieza, ante las cámaras del Congreso.

La paralización del gobierno comenzó el primer minuto del sábado, cuando el presidente Trump y los legisladores republicanos llegaron a un punto muerto en las negociaciones con los demócratas, al vencer el plazo que tenía el Senado para aprobar una extensión del presupuesto por cuatro semanas, previamente aprobado en la Cámara de Representantes.

Los demócratas insisten en que cualquier proyecto de ley para renovar el financiamiento del gobierno debe incluir protección para los dreamers, unos 700 mil jóvenes inmigrantes indocumentados, en su mayoría latinos, llevados a Estados Unidos siendo niños, y que actualmente son beneficiados por el programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA por sus siglas en inglés) que les da permiso para trabajar y estudiar en Estados Unidos, pero la administración de Trump no ha renovado este programa, que vence el 5 de marzo.

Trump y los republicanos insisten en aprobar partidas del presupuesto destinadas al ejército y a la construcción del muro fronterizo con México.