Es una figura pública, un hombre que tiene mitos, dice musicólogo
Jueves 25 de enero de 2018, p. 5
Este 25 de enero se conmemora el sesquicentenario del compositor Juventino Rosas (1868-1894), creador del vals Sobre las olas y considerado el autor de la más exitosa
música de baile del porfiriato, según el musicólogo Ricardo Miranda.
El municipio de Santa Cruz de Juventino Rosas, Guanajuato, tierra natal del músico realiza un festival artístico, cultural y deportivo que se inició el martes pasado y terminará el sábado 27. Habrá un desfile este jueves además de conciertos, conferencias, funciones de teatro y danza, y exposiciones de fotografía y pintura.
En entrevista, Ricardo Miranda hace notar que la música en el siglo XIX estaba ordenada en ciertas categorías en boga.
“Había fundamentalmente tres: la música de baile, la de salón –la que tocaban las señoritas en las casas– y el repertorio más difícil y elaborado. A todo ese conjunto se le ha llamado música de salón, pero eso es demasiado general”, explica.
“La precisión es importante porque lo que escribió Juventino Rosas fue la más exitosa música de baile del porfiriato. Todas sus danzas estaban destinadas a ser bailadas, y pues indudablemente tuvo un enorme éxito. Claro, es deslumbrante en el caso de Sobre las olas”.
El especialista recuerda que la casa editora de Juventino Rosas en vida fue Ediciones Wagner y Levien, la cual vendió muchísimos ejemplares de las piezas de ese autor a finales del siglo XIX, lo cual provocó que tuvieran una difusión fenomenal
.
Asegura que prácticamente estaban en los pianos de todas las casas, se tocaban en los kioscos, en los bailes, en cafés y restaurantes; había toda suerte de arreglos y versiones.
Reitera que es necesario colocarlo en su justa dimensión y desde allí valorarlo: “Como autor de música de salón sí que fue extraordinario, alguien a quien la palabra inspiración le viene muy bien, porque lo poco que sabemos de su biografía nos habla de una formación más bien práctica, ajena a toda academia, a toda escuela, y sin embargo fue capaz de capturar esa esencia, transformarla en música y deleitar a varias generaciones. Más de una persona, sigue disfrutando y bailando con Sobre las olas”.
Para Ricardo Miranda resulta imperativo no soslayar la obra de Juventino Rosas y, en una comparación con la Viena de finales del siglo XIX, destaca que no porque haya existido un Gustav Mahler o un Richard Strauss se va a hace de lado el trabajo de Johann Strauss.
No se trata de compararlos o de ponerlos uno al lado de otro, sino de señalar cuál es el mérito intrínseco de cada uno de ellos. Y en el caso de Rosas fue haber escrito una música de baile fantástica
, refrenda.
–¿Considera que la historia de la música mexicana le ha hecho justicia a Juventino Rosas o es una figura aún por ser rescatada?
–Creo que la respuesta está en medio. Se ha hecho bastante, se conoce su obra, se tiene documentada, catalogada e inventariada, sabemos dónde están las primeras ediciones. En fin, es un compositor bastante bien documentado en cuanto a fuentes y repertorio.
“Un caso curioso con él es que se ha vuelto en apariencia compositor de una sola obra, al igual que le pasa a José Pablo Moncayo con el Huapango. Para la gente es difícil dar un segundo o un tercer título de sus obras.
“El discurso sobre Juventino Rosas, como sobre cualquier compositor, desde Beethoven hasta el más joven de los de hoy, es un discurso que siempre puede enriquecerse y mejorar.
Quedan cosas por decir, indagar, por explicar, pero al mismo tiempo ha sido un personaje investigado, que tiene ediciones, que es una figura pública, que escuelas, calles y sitios públicos llevan su nombre; se han hecho películas sobre su vida, que tiene mitos.