Jueves 19 de abril de 2018, p. 37
Sin el tratamiento al que obligan las normas ambientales, el gobierno de Avelino Méndez Rangel en Xochimilco creó un tiradero de desechos de construcción que mantiene a más de 300 familias del condominio Acueducto de Xochimilco, en la colonia Ampliación Tepepan, expuestas a fauna nociva, enormes polvaredas y en riesgo de un derrumbe.
El complejo habitacional, localizado en la avenida Acueducto número 5099, colinda con una enorme montaña de cascajo que rebasa en altura el tamaño de los edificios. También están dos escuelas: el Colegio de Bachilleres 13 y el Cetis 39.
El pesado material, producto de los derrumbes provocados por el sismo del 19 de septiembre, está a punto de vencer la barda perimetral que divide el depósito delegacional con el conjunto habitacional, alertaron los vecinos.
La administradora Angélica Ledias Rentería, mediante un sinnúmero de oficios, desde junio pasado ha solicitado a las autoridades de la delegación la reparación de la barda, pero ante la omisión, los habitantes del conjunto de 290 departamentos tuvieron que cerrar áreas comunes, los juegos infantiles y espacios deportivos, debido al riesgo inminente del desplome de la barda.
Ayer acudieron otra vez a las oficinas de la delegación y no obtuvieron respuesta de la autoridad.