Silao, Gto.

Seguridad, economía y educación son los principales temas que deberá atender el próximo presidente de México, aseguró el director general del Instituto Politécnico Nacional (IPN), Mario Alberto Rodríguez Casas. Aseguró también que esta casa de estudios no tiene capacidad para aumentar su matrícula en educación superior, debido en gran parte a la insuficiencia en los recursos económicos. Y es que de las 100 mil solicitudes de ingreso que recibió el IPN para el siguiente ciclo escolar, sólo 22 mil aspirantes serán aceptados.

Si en este momento nosotros quisiéramos aceptar a los 100 mil jóvenes que nos demandan un espacio, no tenemos capacidad física. Sin duda habrá que trabajar en eso, en un proyecto a mediano plazo en lo que se pueden dar las condiciones de infraestructura para poder hacerlo, dijo Rodríguez Casas. Entrevistado en el marco del quinto foro regional México 2018: los desafíos de la nación, las plataformas electorales discutidas por universitarios, realizado en la Unidad Profesional Interdisciplinaria de Ingeniería campus Guanajuato (UPIIG) del IPN, aclaró que no sólo la cobertura es el problema, sino también la calidad. No se trata solamente de crear salones, sino de tener las condiciones para que formemos a los jóvenes. Sí, necesitamos ampliar la cobertura. Pero para eso requerimos mayores instalaciones, para eso necesitamos equipamientos, edificios en donde alojar a estos jóvenes y eso representa tener mayores recursos, insistió.

Convocado por la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior (Anuies) y el Instituto Nacional Electoral (INE), el foro analizó las propuestas electorales de las diferentes coaliciones partidistas y candidatos presidenciales –incluido los independientes– en materia de innovación tecnológica y vinculación del conocimiento con el desarrollo nacional.

En la inauguración, el director del IPN anunció que la institución integrará un documento con las propuestas para que puedan traducirse en políticas públicas para el próximo gobierno y así potenciar el desarrollo económico del país.

Durante las intervenciones de los representantes de las coaliciones y candidatos, así como de especialistas en el ámbito universitario, se formularon diversas conclusiones, entre las que destacaron la importancia de que la academia y el sector productivo deben impulsar nuevas formas de trabajo y coordinación que ayuden a la conformación de políticas públicas acordes con el mundo globalizado.

En una larga serie de propuestas, se planteó que las universidades deben responder de manera más rápida a los cambios en la sociedad; se puso el ejemplo de la lentitud con que se adaptan los planes y programas de estudio, lo cual genera rezago en la formación de egresados.