Caracas

El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, denunció ayer que su país es víctima de un ataque organizado por la oposición en complicidad con el gobierno de Estados Unidos, luego de que la víspera se conoció que el mandatario estadunidense, Donald Trump, planteó una invasión a la república bolivariana.

Una agresión multidimensional se ha disparado contra el pueblo de Venezuela, pero éste no cede, no se rinde, no regala su libertad, que nadie se confunda, el pueblo tiene su esperanza en la batalla que está dando contra la guerra económica de la oligarquía, expresó Maduro.

Durante un acto por los 207 años de independencia, el mandatario recordó que hace un año el imperialismo y sus lacayos internos dirigieron acciones de violencia que buscaban llevar a Venezuela a una guerra civil.

Pidió a la Asamblea Nacional Constituyente (ANC), a la fuerza armada y a los consejos comunales sumarse a la lucha para lograr la paz y la independencia económica de la nación.

En ese contexto, la ANC aprobó iniciar una investigación contra opositores traidores a la patria que promueven una intervención externa.

Todo aquel que haya llamado a una intervención en Venezuela, en caso de que esto ocurra, tiene que ser tratado como un enemigo y un traidor a la patria. Todos aquellos que hayan incurrido en esta situación hay que denunciarlos, afirmó el presidente de la Constituyente, Diosdado Cabello.

En tanto, en un comunicado de prensa, el secretario estadunidense de Estado, Mike Pompeo, felicitó a Venezuela por su independencia.

Aun ante un régimen dictatorial, el país continúa adelante, revitalizando los ideales de libertad e igualdad con los que se fundó, dijo.