La mayor esperanza de vida de las personas, la disminución de trabajadores activos en relación con los pensionados y el crecimiento del empleo informal son algunos de los factores que explican las crisis de los sistemas de seguridad social y de pensiones, afirmaron especialistas de organizaciones internacionales.

Raúl Ruggia-Frick, director de Conocimiento del Centro para la Excelencia de la Asociación Internacional de la Seguridad Social (AISS), comentó que los retos de los sistemas afectan en mayor medida a las mujeres, quienes desempeñan actividades no remuneradas y en el sector formal perciben bajos salarios, lo que al final se verá reflejado en una pensión baja y eso si es que cumplen con los requisitos, principalmente las semanas de cotización.

El especialista participó ayer en el Foro Regional de Pensiones 2020, organizado por la Conferencia Interamericana de Seguridad Social, donde también comentó que entre los retos a resolver está que las aportaciones de los trabajadores no son constantes y los empleos son precarios (sin prestaciones sociales). Estos y otros factores contribuyen para que las personas lleguen al final de su vida laboral sin la certeza de que tendrán una pensión.

O si la obtienen, dijo, cada vez es más frecuente que el monto se vea disminuido por la necesidad de pagar sus medicamentos y/o servicios de cuidados.

El pasado lunes, también en sesión del foro, Isabel Ortiz, directora del Programa de Justicia Social Global de la Universidad de Columbia, comentó que de 30 países que privatizaron su modelo de pensiones en los pasados 40 años, 18 están en el proceso para revertirlos.

La decisión se debe a que quedó en evidencia que el modelo fracasó y tuvo como resultado tasas de cobertura estancadas o disminuidas, niveles de beneficio en deterioro, aumento en la desigualdad de género y de ingresos, altos costos administrativos, concentración del sector de los seguros privados, entre otros, sostuvo la especialista.

Ayer, durante el segundo día de actividades del foro regional, María José Tarrero, asesora de la Organización Iberoamericana de la Seguridad Social (OISS), dijo que entre las estrategias para fortalecer los esquemas pensionarios tendría que incluirse el fortalecimiento del sector formal.