Homenaje a Marie-Laure de Decker
omo suele hacerlo cuando se trata de una gran figura de un arte cada vez más apreciado, la Casa Europea de la Fotografía en París dedica todo su espacio a la primera gran retrospectiva de una figura clave del fotoperiodismo: Marie-Laure de Decker. Es también un homenaje en el que se destaca su perspectiva y enfoque, capaces de crear un diálogo entre la historia y lo íntimo, y cuyo trabajo hoy cobra especial relevancia.
Marie-Laure de Decker (1947-2023) captó con su cámara la historia de la segunda mitad del siglo XX. En un campo mayoritariamente masculino por los riesgos y sacrificios que conlleva, ella lo hizo con valentía, documentando las grandes convulsiones de su época.
Sus reportajes cubren importantes conflictos, como la guerra de Vietnam, el apartheid en Sudáfrica, las protestas en Chile contra la dictadura de Pinochet, la vida en China y la Unión Soviética, los conflictos armados en Chad y Yemen. En Francia, cubre acontecimientos políticos y sociales, como la primavera del 1968. Ella nunca quiso mostrar sangre ni víctimas. Las realidades de la guerra y la violencia son evidentes en algunas de sus imágenes a través de los rostros y las historias de quienes la experimentan.
La belleza de las imágenes de combatientes de Yemen y Chad posando orgullosos con sus armas; las de mujeres jóvenes sirviendo de entretenimiento sexual a los soldados estadunidenses en Vietnam contrastan con la cruda realidad que muestran; sin embargo, a pesar de estos terribles acontecimientos, Marie-Laure de Decker no se apartó de lo bello y lo humano.
La fotógrafa también es conocida por sus retratos y autorretratos. Con éxito se involucró en el mundo del arte, el cine y la moda, mostrando a los grandes artistas de su tiempo: Marcel Duchamp, Catherine Deneuve, Federico Fellini, Man Ray, Jean Paul Sartre, Nelson Mandela, Gabriel García Márquez, Patrick Modiano, Maurice Bejart y Luis Buñuel, en imágenes tan poderosas y expresivas como sus reportajes.
No fue ajena al cine y a las revistas de moda, como, Elle y Vogue. Solía decir: “¡Mi vida es la fotografía!” Vivió 100 vidas y de todas ellas dan testimonio 290 fotos seleccionadas para este merecidísimo reconocimiento.