''Lanzamiento'' de la Campaña por las Bibliotecas Mexicanas
El destino de la lectura nacional está en las manos de Hayek, Campos y Ramones
Televidentes y radioescuchas serán invitados a utilizar esos recintos en el país
El proyecto que impulsa el gobierno federal soslaya la participación de los escritores
CESAR GÜEMES
El buen destino de la lectura en México, esa gran ausente, está en manos de un portero al que persigue la sombra de un conejo, en boca de un conductor adicto al monólogo y en la belleza de una de las muy escasas actrices mexicanas que tienen participación activa en Hollywood.
No es broma. Ellos de alguna suerte reconocen su destino y cómo ha sido la relación con los libros y la lectura. Jorge Campos, Adal Ramones y Salma Hayek estelarizan el nuevo capítulo del gobierno federal para que las mexicanas (y los mexicanos) se decidan por fin a poner un pie en la biblioteca de su preferencia.
''Hacia un país de lectores''
El primer paso del esfuerzo se antoja paradójico: los medios de comunicación masiva, merced a los cuales, entre otros factores, la lectura es casi impracticable en el país, serán la vía para que México en su conjunto se decida a bajarle a las horas de televisión y radio cambiándolas por un libro. Campos, Ramones y Hayek son la cabeza de playa a fin de que el gobierno federal emprenda en breve una sonora y movida publicidad mediática en la que se invitará al televidente y radioescucha a hacer uso de las bibliotecas nacionales. Ese fue el anuncio más importante que ocurrió la mañana de este lunes en la Biblioteca de México, durante lo que fue el ''lanzamiento" (las comillas indican textualidad) de la Campaña por las Bibliotecas Mexicanas.
Salvo la participación de Germán Dehesa, entre los invitados de honor la moneda de cambio durante el acto oficial fue la ausencia de escritores. Por ahí estuvieron, ciertamente, Ignacio Solares, Gonzalo Celorio, Vicente Quirarte y Eduardo Lizalde. Salvo ellos más un par que la vista no alcanza a distinguir, un proyecto que debería incluir a los escritores mexicanos no los consideró. En todo caso, a las filas de los nuevos promotores de la lectura se sumarán pronto, se dijo, nada menos que Hugo Sánchez y probablemente Ana Guevara. El asunto, es preciso decirlo, se enmarca dentro de la iniciativa denominada ''Hacia un país de lectores".
Filiberto Martínez Arellano, presidente de la Asociación Mexicana de Bibliotecarios, comenzó el acto en el que se encontraron Marta Sahagún de Fox, presidenta honoraria de la campaña; Sara Bermúdez, titular del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes; el secretario de Educación Pública, Reyes Tamez; Juan Alcocer, diputado; Claudio González Guajardo, de la Fundación Unete, y Jorge von Ziegler, director de bibliotecas del CNCA.
''Proyecto de amor''
Bermúdez califica la campaña de muy diversas formas, entre ellas apunta: ''Quiero decir que éste es también un proyecto de amor, por nuestros niños y por nuestros jóvenes, para que tengan más y mejores oportunidades para desarrollarse y crecer como seres humanos".
Toma el micrófono Salma Hayek, lejana deidad creada por Tarantino; apunta que padeció dislexia y dice: ''Por eso me habría gustado mucho que alguien me hubiera motivado a leer porque, más tarde, me di cuenta de la importancia que tenía la alectura para el desarrollo; creo que los libros son grandes provocadores del pensamiento, el alimento del artista, del filósofo, del político, etcétera, etcétera, etcétera".
Jorge Campos se limita a decir que ''es un gran honor para nosotros los deportistas estar en este tipo de campañas y esperamos que todos los niños y los jóvenes de México tengan esa oportunidad para leer, porque pienso que siempre es importante estar bien preparado". Adal Ramones no aguanta las ganas de hacer un sketch, aunque sea breve: habla sin que se escuche lo que dice y da las gracias. Retoma la palabra ahora sí de viva voz y confiesa: ''Tuve acceso a los libros desde muy niño, libros para colorear. Luego empecé a leer los otros libros y me sirvió de mucho porque en ellos se decía lo que no había que hacer en la vida y es lo que estoy haciendo ahora".
Reyes Tamez prepara el cierre con una cifra que indica mayor apoyo a la educación. Marta Sahagún se pregunta en su discurso, refiriéndose a las bibliotecas: ''ƑDe qué sirven estos lugares maravillosos si son pocas las personas que los visitan o no tienen los recursos modernos para hacerlas atractivas y eficientes?"
Spots dedicados a promover la lectura. Para que luego alguien se interrogue por qué las multitudes prefieren de todas todas al Conejo Pérez.