Antonio Malacara

Juan José Calatayud, 40 años en el jazz

EL PASADO MIERCOLES 14, Juan José Calatayud ofreció un concierto en el teatro Benito Juárez, acompañado de su trío y de la cantante Patricia Carrión, para con ello dar inicio a un extenso homenaje que la Secretaría de Cultura de la Ciudad de México ha preparado en reconocimiento a los 40 años del maestro como uno de los músicos más importantes del jazz mexicano.

EL SEGUNDO CONCIERTO de este homenaje se llevará a cabo el 24 de agosto en el Zócalo, a partir de las seis de la tarde, con la participación, además, de Heberto Castillo y Michel Camilo. El 11 de septiembre continuarán los festejos en el Museo de la Ciudad de México, con Rodolfo Popo Sánchez como invitado especial. Y, finalmente, está programado un concierto en el Teatro de la Ciudad, donde Calatayud será acompañado por su trío, por Patricia Carrión y por una orquesta de 56 músicos bajo el nombre de Sociedad Filarmónica, pues aunque el 80 por ciento de estos atrilistas son parte de la Orquesta Filarmónica de la Ciudad de México, por razones laborales no se puede utilizar tal nomenclatura.

"EN CUANTO A la forma de tocar de los jazzistas de México -comenta el maestro a La Jornada poco después de su concierto en el Benito Juárez-, pues obviamente, y para bien, han evolucionado de acuerdo a como el jazz mismo ha tenido su desarrollo; o sea que los jóvenes... los que aún son jóvenes mientras no haya otra propuesta, como Agustín Bernal, como (Héctor) Infanzón, ellos, Diego Maroto, todos ellos, están haciendo su jazz de vanguardia como corresponde. Y bueno, yo veo con satisfacción que el jazz en México ha tenido la evolución que debe tener".

-¿Y EN CUANTO a difusión y lugares para tocar?

-EN DIFUSION Y lugares para desarrollarse todo sigue igual. Mire, yo, cuando quería tocar jazz, no había más que escasamente unos tres lugares para poder ir a escuchar a los de entonces, que eran el Riguz, el Bar 33 y el bar Veranda, del (hotel) María Isabel; ahí era donde se tocaba jazz. Siendo ya una ciudad tan grande, pues no había más que esos tres lugares. Ahora está peor, porque creo que nada más el que se ostenta como lugar de jazz es el Nueva Orleáns, que durante mucho tiempo tuvo música más bien brasileña.

-PERO EL JAZZ sigue presente...

-SIN EMBARGO, LOS músicos que hacen el jazz, pues igual que antes, viven realmente de otras actividades dentro de la música, principalmente acompañando a cantantes populares. Así como ahora Héctor Infanzón, me parece que es del grupo de Napoleón, creo, o algo así; o Villicaña, Bernal y Tony Cárdenas fueron los músicos de Francisco Céspedes. Igual antes. Chilo Morán fue director artístico de José José mucho tiempo y Víctor Ruiz Pasos de Tatiana; y así, para vivir de la música hacen otras actividades. Pero en cuanto al talento y la creación están muy bien. Ahora, en cuanto a los conciertos, afortunadamente el jazz siempre ha contado con un público muy sólido; porque en cuanto hay un festival de jazz, que es donde se ha refugiado mucho esta música, las salas de conciertos siempre tienen un muy buen número de asistentes, un público muy cálido y que siempre nos sigue

-Y EN LO particular, ¿cómo se siente usted con estos 40 años en el jazz?

-ME SIENTO MUY joven (el maestro ríe franca y ampliamente). Pareciera que apenas han sido cinco... Caray... yo tengo mucho entusiasmo al contar con un público que siempre está conmigo, que me recibe muy bien, que no me deja ir. Estoy muy contento y muy agradecido por todo esto.