Directora General: Carmen Lira Saade
México D.F. Jueves 19 de diciembre de 2002
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Cultura

Todo y la recompensa, ''corte de caja'' en el género

Daniel Sada reúne todos sus cuentos en un volumen

El autor se dedica ahora a poesía y novela; si no, ''me habría anquilosado como escritor'', comenta

CESAR GÜEMES

Según Daniel Sada, su obra de narrativa corta está cancelada justo ahora que acaba de publicar Todo y la recompensa. Cuentos completos (Debate). Para él, un escritor que obtuvo el reconocimiento de los lectores justamente por sus obras breves, este volumen representa una decisiva terminal, y dice a La Jornada: ''Hace 10 años que no escribo cuento; estoy muy abocado a la novela y ahora inclusive estoy dedicado a la confección de poesía. Así soy libre".

-ƑEstamos ante un corte de caja o por qué razón decidiste abandonar el género?

-Hace 10 años que no he escrito cuento; estoy muy abocado a la novela y ahora incluso estoy escribiendo poesía. Sé que me instalé en el género de cuento a lo largo de más de una década. De hecho, obtuve en Premio Villaurrutia por un libro de cuentos, pero la decisión de reunir todos mis escritos breves responde a que estaban en diversas editoriales y ahora, por fin, los veo reunidos. Pienso, por otra parte, que en realidad son cuentos ''semicompletos'', porque espero escribir más de ellos en el futuro. Por ahora no lo practico, porque estoy muy en la novela.

-La decisión editorial y mercadotécnica de no apoyar al cuento seguramente desfavorece al género.

-En todo el mundo es así, ni hablar. El único país donde se lee cuento y donde los libros del género son un éxito es Estados Unidos. De ahí, ni en países como Inglaterra, Francia o Alemania quieren saber nada al respecto. Acaso en Bulgaria acaban de hacer una antología de cuentistas latinoamericanos, algo insólito que no ocurre desde luego en la región. El caso es que la gente quiere leer dramas humanos, y el cuento no tiene, por sus dimensiones, la posibilidad de desarrollar grandes situaciones de esa naturaleza. Pienso que en el cuento las situaciones se imponen a los personajes, no existe la posibilidad de hablar de un carácter o un temperamento, ni de que los personajes sean modificadores o transgresores de la historia. Las situaciones en el cuento son más importantes que los personajes. Eso se presta mucho al ingenio. Quiero decir que para escribir cuentos tienes que ser ingenioso. Por otra parte, es muy difícil que en un libro del género todos los cuentos sean buenísimos, por lo general hay dos muy buenos y el resto es relleno.

''Además, creo que es una forma que se ha anquilosado, ha caído en fórmulas y en recetas, en modelos preconcebidos como la vieja fórmula de 'planteamiento-duda-desenlace', que de forma lamentable ha prevalecido a lo largo de más de un siglo. No hay renovación del género. De manera usual un cuentista encuentra una fórmula y sólo la recicla. En mi caso, en cada cuento que he hecho me he planteado una estructura diferente, como lo hizo Rulfo o Arreola: cada cuento es un modelo único e irrepetible. Pero la mayoría de los cuentistas generalmente caen en recetas y se vuelven muy celosos y gruñones contra todo aquello que rebase sus límites. Si yo hubiera seguido escribiendo libros de cuento sin transitar por la novela me habría anquilosado como escritor".

-ƑSe reconoce en Todo y la recompensa, así hayan pasado 10 años que no toca el género?

-Estoy presente. Lo que me permitió el cuento fue explorar en estructuras dramáticas. Aunque muy pocos de ellos implican desarrollo de personajes sino más bien son los personajes quienes dominan, sí pude entender lo que era una estructura narrativa en sus diferentes maneras. Y, sobre todo, encontré diversos puntos de vista para la construcción dramática. En ese sentido, como dice el maestro Augusto Monterroso, cuando mis cuentos no me salen como cuentos, los vuelvo ensayos. Así que en este momento estoy reconociendo que en Todo y la recompensa hay muchos ensayos. No creo en el "cuento redondo", al contrario, desconfío de él, por eso mis novelas y mis narraciones cortas tienen en muchas ocasiones finales abiertos.

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