Organizaciones femeniles y pro derechos humanos repudiaron la aprobación de la ley antiaborto por la Comisión de Puntos Constitucionales del Congreso de Querétaro, y aseguraron que esa determinación implica un retroceso en las garantías de las mujeres y viola los tratados internacionales en materia de derechos sexuales y reproductivos.

Con esa decisión, adoptada el lunes pasado, son ya 15 los estados que han modificado sus constituciones para penalizar la interrupción del embarazo, con lo cual, aseguraron las agrupaciones civiles, se pone en riesgo la libertad y la vida de las mujeres al tener que someterse a prácticas clandestinas y muchas veces insalubres.

Esa modificación defiende la vida desde la concepción, con lo cual se eliminan las causales que permitían abortar en caso de violación o de que el embarazo pusiera en riesgo sus vidas.

La medida refleja la misoginia de los poderes Legislativo y Ejecutivo al negar a las mujeres derechos que ya tenía reconocidos desde el siglo pasado. Ahora, al reconocer la vida desde el momento de la concepción, ya no se permite ni el dispositivo intrauterino, porque éste impide la implantación del óvulo fecundado, expresó Noemí Ramírez, directora de la Academia Mexicana de Derechos Humanos.

Por su parte, Erika Tapia Peláez, de la Federación Mexicana de Universitarias, consideró que dichos cambios, que responden a la intromisión de la Iglesia y al avance de la derecha en el país, violan el artículo cuarto constitucional, el cual garantiza el derecho de las mujeres a decidir sobre la maternidad.

En México se pretende condenar a las mujeres como criminales, cuando en países como Rusia el aborto es un derecho desde 1955. Pareciera que un cigoto o embrión, que ni siquiera es feto porque ni forma humana tiene, posee más derecho que una ciudadana mexicana, un humano perfectamente formado.

Flor Alegría, de Católicas por el Derecho a Decidir, no descartó que esas modificaciones puedan avanzar hasta el planteamiento de una iniciativa federal en la 61 Legislatura.