Integrantes de corrientes perredistas secundaron la afirmación de Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano de que la dirigencia nacional del Partido de la Revolución Democrática (PRD) ha perdido el rumbo y carece de autoridad moral para dirigir un instituto político progresista.

A esas críticas, por supuesto, no se sumó Nueva Izquierda (NI), corriente a la que pertenece el presidente nacional del sol azteca, Jesús Ortega Martínez.

El coordinador nacional de NI, Miguel Barbosa, consideró que la opinión de Cárdenas es muy importante, que se respeta su trayectoria, pero me inclino más por atender los resolutivos de los órganos de decisión del partido que las opiniones de un personaje tan importante.

Alianza lamentable

En tanto, en el Senado, Carlos Sotelo y Tomás Torres compartieron plenamente los señalamientos de Cárdenas, y consideraron necesario instar tanto a éste como a Andrés Manuel López Obrador a impulsar la reflexión y replantear el rumbo del PRD.

Los senadores Silvano Aureoles y Alfonso Sánchez Anaya justificaron a la dirigencia que encabeza Ortega con el argumento de que las alianzas con el Partido Acción Nacional (PAN) las aprobó el congreso perredista.

Sotelo advirtió que los grupos que dominan en el PRD pasaron por alto los acuerdos del reciente congreso partidista, en el cual se resolvió formar un gran bloque programático de las izquierdas con el fin de derrotar a la derecha que representan el PAN y el Partido Revolucionario Institucional (PRI), converger con los movimientos sociales y recuperar a sus liderazgos históricos.

La dirigencia perredista perdió el rumbo, afirmó el martes el ex candidato presidencialFoto José Núñez

En lugar de ponerse a trabajar en ese sentido, salieron corriendo a buscar al gobierno de Felipe Calderón para pactar con él, con su gobierno fracasado, la lamentable alianza con la derecha, recalcó Sotelo.

Torres consideró que la dirigencia nacional perredista anda extraviada y alejada de los principios del partido. Los acuerdos pragmáticos, excluyentes de la militancia en las contiendas político-electorales de 2010, desvirtúan al PRD y lo ponen en riesgo para 2012, recalcó.

Pero Aureoles, vicecoordinador de la bancada perredista en el Senado, comentó que preocupa esa postura expresada por dirigentes nuestros valiosos, con una trayectoria importante, ya que pueden meter confusión entre la militancia y hacer que se interprete que el PRD está ayudando al PRI a que se fortalezca y regrese al poder, sin que eso sea cierto.

Alfonso Ramírez Cuéllar, de Red por la Unidad de las Izquierdas, expuso que la pérdida de autoridad moral viene de que la dirigencia nacional no lucha por casi nada. Cárdenas no descubre nada nuevo, eso se ha perdido desde hace años, abundó.

Camilo Valenzuela, de la Red de Izquierda Revolucionaria, afirmó que se gesta un bloque que busca una nueva conducción para el sol azteca, entre otras razones, porque la actual dirigencia ha desconocido la línea política que aprobó el congreso nacional de ir en un gran bloque de las izquierdas, y no dar un viraje hacia la centro-derecha.