Arrebatos carnales es el título de la trilogía erótica mexicana escrita por Francisco Martín Moreno en la que se novelan episodios amorosos o eróticos, entretejidos con la biografía política, social, intelectual o artística de algunos de los protagonistas de la historia de México.

Los volúmenes de esa serie se dividen en su portada por sábanas rojas, blancas y verdes. Arrebatos carnales I incluye personajes como Porfirio Díaz, José Vasconcelos, Maximiliano y Carlota, Francisco Villa, Sor Juana Inés de la Cruz y José María Morelos.

En el segundo volumen, puesto en circulación también por la editorial Planeta y presentado hace unos días, figuran María Ignacia Rodríguez de Velasco, conocida como La Güera Rodríguez; Diego Rivera, Isabel Motecuhzoma, Josefa Ortiz de Domínguez y Lázaro Cárdenas.

Según Francisco Martín Moreno, en contraste con aquellos historiadores que han puesto a los protagonistas de nuestra historia sin pasiones, sin debilidades y fortalezas, sin inclinaciones sexuales, como si no fueran seres humanos, él se dio a la tarea de novelar aspectos eróticos de ciertos personajes.

Paralelamente a la historia política se cuenta la historia amorosa, romántica o sensual, porque yo no puedo desvincular a una persona de su vida amorosa, sea intensa o no, explicó el autor.

Por ejemplo, La Güera Rodríguez fue una mujer inteligente y audaz cuya historia se cuenta en primera persona y en la que se subraya su relación con el emperador Iturbide.

A Josefa Ortiz de Domínguez, prosigue Martín Moreno, se le recuerda siempre de perfil con un gran chongo y papada. Sin embargo, era una mujer muy guapa, distinguida, educada y de facciones exquisitas. Se trataba de una líder ejemplar, llena de vida. Tuvo 14 hijos, uno de ellos lo tuvo cuando aún estaba casada con el corregidor, Miguel Domínguez.

En este caso se novela la intimidad de cómo la corregidora, según Martín Moreno, se pierde prácticamente de amor por Ignacio Allende: hombre alto, más joven que ella, con una fortaleza física impresionante.

Las mujeres de Diego

Isabel Motecuhzoma cuenta la historia desde el punto de vista de los vencidos. Fue esposa de dos emperadores, Cuitláhuac y Moctezuma. Cortés la viola, tiene una hija con él, a quien pone el nombre de Leonor. Sus arrebatos carnales son con Cuauhtémoc y su primer marido español.

Otros episodios novelados son las relaciones de Diego Rivera, quien tuvo a todas las mujeres que quiso, abunda el autor. No he conocido a un hombre que haya tenido tantas mujeres. Tuvo a Dolores del Río, María Félix, Dolores Olmedo; a Frida Kahlo, a su hermana, a Guadalupe Marín, en fin, hasta las estudiantes que llegaban a su estudio.

Arrebatos carnales II concluye con la figura de Lázaro Cárdenas. Martín Moreno aprovecha la ocasión para entretejer y novelar una serie de apuntes críticos a la biografía política del general Cárdenas, así como para dar cuenta de los muchos hijos que tuvo.