Cada año se generan en México alrededor de 134 mil toneladas de residuos peligrosos y no hay suficientes lugares autorizados para acopiarlos, reciclarlos o confinarlos adecuadamente, señaló el titular de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), Hernando Guerrero.

Necesitamos más infraestructura y no espantarnos porque se abran empresas que den un adecuado manejo a estos recursos. Es más preocupante que estos materiales peligrosos sean tirados en cualquier sitio, señaló.

La Profepa informó que de la planta Apaxco, de la empresa Ecoltec, retiró 3.5 millones de residuos peligrosos, así como 1.8 millones de litros de agua presuntamente contaminada, por lo que prácticamente ya desapareció el riesgo para la salud de los habitantes de poblaciones en el estado de México.

Esta planta se localiza en el kilómetro 0.1 de la carretera estatal Progreso-Apaxco, donde se hizo una revisión luego de la limpieza del sitio y no se encontraron drenajes clandestinos que condujeran agua al cauce del río Salado o terrenos agrícolas, lo cual era uno de los temores del grupo Pro Salud Apaxco-Atotonilco, agrupación que en 2009 presentó una denuncia popular ante la Profepa.

En conferencia de prensa, Hernando Guerrero informó que se encontraron 93 residuos peligrosos distintos, como cloruros, combustóleo, fármacos y productos químicos caducos, así como varios reactivos de laboratorios.

El 71 por ciento de los desechos fueron llevados a un Centro Integral para el Manejo, Tratamiento, Aprovechamiento y Disposición Final de Residuos Industriales Peligrosos, ubicado en Ramos Arizpe, Coahuila.