América Latina será el invitado de honor en 2016, al cumplirse 30 años, anuncia
El formato se amplió a otras áreas del conocimiento, como la divulgación científica, detalla
Resultó doloroso trabajar en esta novela; con qué derecho me meto
, revela la escritora
Mi abuela padeció el desamor de su madre, recuerda su nieto, Diego López Rivera
Con la obra saldo una vieja deuda con mi ideología comunista, dice
Unos 300 músicos y cantantes deleitan con un esperanzador concierto en Chapultepec
Escucharlos se traduce en la esperanza que podemos vivir, afirma Arturo Márquez
Obra reunida fue traducida al español por Pura López Colomé
Acerca al lector hispano a una importante obra del siglo XX: Holtz
Presentan volumen del literato veracruzano en Bellas Artes
Marisa Lara y Arturo Guerrero montarán cuatro esculturas en el Centro Histórico
Los artistas hilvanan el reino de los animales con las sociedades mediante un nexo lúdico
Londres. El descubrimiento de un nuevo Da Vinci siempre causa sensación, pero desde hace años está en entredicho si La bella principessa fue pintada realmente por el artista italiano. Un falsificador de arte británico asegura ahora que él es el autor del retrato y que la modelo es Sally, una cajera de supermercado. Pinté el cuadro en 1978, cuando trabajaba en Co-op
, una cadena de supermercados británica, afirma Shaun Greenhalgh en su libro A forger's tale. El mundo del arte se juega mucho tras esta revelación: mucho dinero y el prestigio de algunos expertos, que están convencidos de que La bella principessa es un verdadero Da Vinci, el cual fue valorado en al menos 100 millones de euros (106 millones de dólares). Greenhalgh asegura que utilizó como lienzo un documento de 1587 y como base la tapa de un escritorio victoriano. Al dibujar, giró el cuadro para imitar a Da Vinci.