Domingo 25 de agosto de 2019, p. 4
Fritz Glockner ha dedicado a la investigación de guerrilla 30 años por razones obvias
, menciona el escritor y periodista. Su papá, Napoleón, y su tía Julieta fueron asesinados por su participación en la izquierda armada de los años 70.
La historia irrumpe en la escena familiar
, dice a La Jornada. Ese hecho es el eje de sus novelas Veinte de cobre y Cementerio de papel, y lo impulsa a escribir los libros Los años heridos: la historia de la guerrilla en México 1968-1985 y Memoria roja: historia de la guerrilla en México 1943-1968.
Para escribir los dos ejemplares de Historia de la guerrilla en México “me van empujando las circunstancias. Me empujan Andrés Ruiz, Adolfo Aguilar Zínser y Paco Ignacio Taibo II: ‘con el apellido que cargas, ¿quién más para contar la historia que nadie ha contado?’”
El narrador refiere que Cementerio de papel surgió a raíz de caminar por la misma calle para encontrarme de nueva cuenta con mi padre. Y percatarme de que tanto trabajo nos costó a los Glockner sacar a Napoleón de Lecumberri para que ellos me lo regresen convertido en papel
.
En Los años heridos, agrega el actual director de Educal, “una cosa fue jugar con la ficción en el aspecto familiar. Mi tía y mi padre. Haberlos metido en Veinte de cobre, Cementerio de papel, tres o cuatro documentos, y otra escribir la historia de mi raza en este libro.
“Fue tan cabrón, que cuando estaba revisando el escrito pensé: ‘pendejo, has escrito literatura, un ensayo, un homenaje para Julieta para un encuentro de mujeres guerrilleras, pero no has escrito la historia de tu padre y de tu tía en este libro. Es historia y tu padre es uno de los sujetos históricos’.”
Relata que le costó trabajo escribir sobre Diego Lucero, Lucio Cabañas, Alicia de los Ríos, David Jiménez Sarmiento, Roberto Antonio Gallangos, Carmen Vargas, Leticia Galarza, porque sus hijos son mis hermanos; imagínate el huevo que me costó meter a mi padre y a mi tía como sujetos históricos
.
Adelantó que para la presentación de Los años heridos quiero convocar a Micaela Cabañas, a Alicia de los Ríos, a Alejandra Gallangos y a Diego Lucero hijo. Lo que nuestros padres no lograron hacer: estar reunidos en una mesa, nosotros lo hemos logrado por fortuna
.