El día 15, cuando la iglesia de San Juan Bautista de Tlayacapan sumaba
campanadas
para anunciar las 11:00 de la noche, desde un balcón
del palacio municipal --único
edificio civil del siglo XVI que
pervive-- se pronunció el Grito tradicional.
¿Qué fervor es éste que nos hace creer en un México que no quiere
dejar de existir?
Ernesto Zedillo y su esposa Nilda Patricia durante el Grito Foto: Ernesto Ramírez
La parada se dirigió por Paseo de la Reforma desde el Zócalo; casi 29
mil
militares participaron en el desfile Foto: Víctor
Mendiola
El ``algún día'' en los sueños infantiles
Foto: Francisco Olvera
Panistas en el Angel de la Independencia
Foto: Ernesto Ramírez
Pirotecnia y resguardo militar en el
Zócalo Foto: Ernesto Ramírez
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