 |
Directora General: CARMEN LIRA SAADE Director Fundador: CARLOS PAYAN VELVER Domingo 10 de febrero de 2008 Num: 675 |
|
Bazar de asombros La memoria y guerra Fernando Leal Audirac, Fandangos de la Columnas: |
¡Y… Ennio Morricone viene a México!¡Y viene dirigiendo a la Sinfonietta de Roma! ¡Y además invitará al Coro de México! ¡Y tocará lo mejor de su repertorio para películas! ¡Y se presentará en el Auditorio Nacional del DF (mayo 27), en la Arena Monterrey (29) y en el Auditorio Telmex de Guadalajara (31)! ¡Y habrá seis solistas y doscientos músicos en escena! ¡Y… y… uf… qué bien que va a estar eso! Y podremos aplaudirle frente a frente por perder cinco veces en los premios Oscar (Malena, Bugsy, Los Intocables, La misión y Días del cielo) y por finalmente ganarle a Hollywood recibiendo uno honorífico e inevitable, de manos de Clint Eastwood, en 2007. Y podremos sumarnos a los lugares que lo han visto mover su batuta, del Hammersmith Apollo de Londres al Radio City de Nueva York pasando por la Arena di Verona (su mejor concierto registrado en DVD). Y escucharemos la bella cursilería de Cinema Paradiso (1989), la fuerza siniestra de Érase una vez en América (1984), la simpatía de El bueno, el malo y el feo (1966) y la exaltación de La misión (1986), además de sus visitaciones a Sostiene Pereira, Ricardo III, Víctima de guerra, La Leyenda de 900 y La batalla de Algeria, apenas algunas de las 540 cintas en las que ha participado el compositor romano nacido en 1928. Y entenderemos finalmente, asaeteados por esa afluencia sonorosa, el precioso puente que Morricone tendió entre las canciones populares italianas y la música de concierto, la forma como retomó el espíritu sencillo para embellecer las más bajas o encomiables pasiones del hombre. Y sí, comprenderemos cómo fue que su sensibilidad se incubó en el Conservatorio de Santa Cecilia, cuando se inclinó por la trompeta siendo un niño de nueve años, para luego continuar sus estudios en medio de la segunda guerra mundial. Y aplaudiremos que haya sido en 1961 cuando ingresó al mundo del celuloide con El federal, vía el spaghetti western, para luego trabajar con Pier Paolo Pasolini, Bernardo Bertolucci y Gilo Pontecorvo, y para después sonorizar a Brian de Palma y Pedro Almodóvar, entre muchos otros. Y es que, caso aparte es el de Sergio Leone, pues además de sus muchas colaboraciones hay que decir que fueron amigos desde los primeros días en el colegio. Y bueno, ¿cómo es que un hombre de casi ochenta años sigue tan activo, viajando por el mundo, dando conciertos y componiendo sin parar? Y… no lo sabemos… y… lo que sí, es que sólo en la presente década ha hecho las partituras de Vatel (2000), Misión a Marte (2000), Malena (2000), El juego de Ripley (2002), El cónsul Perlasca (2002), Musashi (2003), Karol, el hombre que se convirtió en Papa (2007) y Karol, un Papa que nunca dejó de ser hombre (2007). Y vaya que suena ridículo, tras leer semejantes datos, que alguien como Gustavo Santaolalla tenga dos Oscares ganados “al hilo” por composiciones tan menores como las de Brokeback Mountain y Babel, cuando hay gente como este italiano compartiendo el mismo aire sobre la Tierra. Y que nos perdonen si somos demasiado duros, pero ya basta de tonterías. Y es que no se puede comparar lo del argentino con nada de lo hecho por mentes como las de Nino Rota, John Williams, Ryuichi Sakamoto, Danny Elfman, Michael Nyman, John Barry, Lalo Schifrin, Bernard Herrmann, Henry Mancini o Vangelis, por citar a algunos de los cuales no suman ni siquiera un premio de la “Academia”. Y así llegamos al final de esta nota; todavía exaltados, alterados, emocionados, trastornados, conmovidos, perturbados, idos, tocados, desequilibrados, chiflados, locos, agitados, asombrados, arrebatados por la noticia de que Ennio Morricone viene a México. Y por ello le decimos, querido lector, que no puede perderse este concierto de ninguna manera. Y es que lo mejor es que va a suceder en el Auditorio Nacional, un sitio perfecto por acústica y tamaño. Y… sí… pensándolo bien, lo último que deseamos (al momento de escribirse esta nota los boletos aún no estaban a la venta) es que los precios no sean prohibitivos. Y es que Ennio quisiera que su música fuera para todos, imaginamos. Y allí nos veremos. Y ya. COLOFÓN CHELÍSTICO Finalmente alguien lo hizo, alguien grabó un disco doble con la obra microtonal del egregio Julián Carrillo. Ese alguien es la chelista mexicana Jimena Giménez Cacho. No deje de asistir y/o escuchar la presentación de esta obra en la sala Julián Carrillo de Radio Universidad, el día 15 de febrero a las 19:00 horas |
