El mayor asesino de Acteal se llama Ernesto Zedillo
PAN: elección antidemocrática
Se aleja de Gómez Morín y El Maquío
Muy difícil que se recupere de la debacle
Corazón de tiempo
Informe del Inegi desmiente que lo peor de la crisis ya pasó
Sèbastien Tellier
Juanson
Peter Hook
Dos años del corredor cultural
n conferencia de prensa conjunta con el presidente uruguayo, Tabaré Vázquez, el titular del Ejecutivo federal de nuestro país, Felipe Calderón Hinojosa, criticó un encabezado publicado en la primera plana de este diario en su edición de ayer, en el que se afirma: Apoya el Ejecutivo mexicano bases de EU en Colombia
; asimismo, el gobernante externó una insinuación realmente improcedente –atinada o no, es lo de menos– sobre la preferencia partidista de la reportera.
En recuerdo de Bertha Zuno Arce
on profundo dolor recibimos la noticia de la muerte de nuestra querida amiga Bertha Zuno Arce, Chiquis, quien fuera sostén y apoyo de cientos de exiliados políticos chilenos y latinoamericanos en México.
n mi último artículo escribí una frase fuerte, pero desafortunadamente cierta, cuyo contenido afirmaba “… empezando por sus gobernantes, que simplemente no entienden ni a quién gobiernan, ni para qué…”; mi afirmación era de carácter genérico, en referencia a quienes tienen la responsabilidad de conducir y coordinar los programas del gobierno de la República y de manera concreta al Presidente. Sus acciones al igual que sus palabras recuerdan a veces el fanatismo religioso de los peores episodios de la vida nacional, como cuando ha mencionado que la drogadicción y el narcotráfico se originan en el desconocimiento de Dios y la falta de fe, otras parecen indicar un ejercicio de acendrado cinismo, como cuando atribuye correctamente a la corrupción los problemas centrales del país, para luego decir que su gobierno es una caja de cristal, como ejemplo a seguir para los gobiernos locales
y la población en general, ignorando de manera brutal los escándalos de corrupción en los que se han visto envueltos varios de sus colaboradores cercanos, como su ex secretario de Gobernación y sus altos jefes de seguridad nacional, por dar sólo unos ejemplos.
sta semana la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) emitió en casos distintos resoluciones contradictorias sobre la procedencia del juicio de amparo, que sin embargo convergen en la continuidad de la vulneración de la tutela judicial efectiva a las víctimas y ofendidos de violaciones graves de los derechos humanos. En ambos se translucen los vacíos y vicios de nuestro sistema de justicia, pero también, y no de distinta manera, las injerencias políticas y la falta de voluntad de nuestro supremo tribunal para trascender la mera legalidad
, siendo de verdad garante de la estricta legalidad
, es decir, de la justicia, como corresponde a una instancia de su naturaleza.
n días pasados fue declarado auto de formal prisión en contra de Héctor Camero Haro, médico y maestro normalista que ha dedicado su vida a apoyar a comunidades pobres en Monterrey, Nuevo León. Como muchos otros jóvenes, a principios de los 70, Héctor se planteó una disyuntiva fundamental: jugársela del lado de los más necesitados o desarrollar una carrera profesional para su progreso personal y familiar. Optó por lo primero y, desde entonces, se ha dedicado al servicio en favor de los demás, formando parte de la asociación civil Tierra y Libertad, organización integrada por hombres y mujeres convencidos de que el cambio social debe construirse sobre bases de independencia y autogestión. Para ello, han impulsado proyectos de vivienda, salud, servicios, educación y defensa del medio ambiente y de los derechos humanos. Su solidaridad se ha extendido hacia otras comunidades del campo y la ciudad.
arece contradictorio, pero la realidad es esta: las clamadas y reclamadas regularizaciones de ciudadanos migrantes ilegalmente residentes en un territorio son un instrumento, uno más, que sirve al sistema de represión de las corrientes migratorias. Es preciso decir que esto no significa en lo absoluto no fijar como horizonte inmediato la necesidad de las regularizaciones, que representan sin duda una salida concreta y real para la vida de millones de personas, quienes, por no tener un papel, pierden de hecho sus derechos ciudadanos. Es imposible, por ejemplo, olvidar las imágenes de cientos de personas constituyendo largas filas afuera de las oficinas gubernamentales en la espera de poder entregar el amplio papeleo que suele pedirse en estos casos. Miles de seres humanos que esperan y concretan en algunos casos la posibilidad de salirse, escaparse, de un estatus absurdo y terrible: la ilegal estancia. Absurda, porque es evidente que ningún ser humano puede ser ilegal. Terrible, porque expone alma y cuerpo a la explotación, al chantaje, al miedo.
scuche. Imaginemos la siguiente escena. Estados Unidos, 2009. Dieciocho mil personas murieron en un año, un promedio de casi 50 al día. ¿Quién los está eliminando? ¿Qué los está matando?
ucha gente no sabe que el aumento de la producción a través de variedades de cultivos de alto rendimiento (semillas mejoradas
o híbridos) conlleva la disminución de nutrientes, vitaminas y proteínas en los alimentos producidos. Es un efecto conocido desde hace décadas por agrónomos e investigadores agrícolas llamado efecto dilución
. El incremento drástico del rendimiento de los cultivos por hectárea basado en semillas híbridas, uso de fertilizantes sintéticos e irrigación eleva el volumen de materia cosechada, pero es menos nutritivo, principalmente porque la misma cantidad de nutrientes se diluyen en mayor cantidad de hojas, granos o frutos.
esulta imposible hablar de María Teresa Pecanins –Tere– sin hablar de toda la familia Pecanins –el fabuloso clan de las Pecas– y de su ópera magna: la Galería Pecanins. Inaugurada en México en 1964, y con una réplica española –catalana, para ser más precisos– abierta en 1972, la vida de Tere Pecanins estuvo íntimamente entreverada con la de los principales artistas –pintores y escultores, sí, pero también escritores, músicos, cineastas– mexicanos y avecindados en México de los pasados 50 años en nuestro país.